Europa pide a España otra reforma laboral para que se trabajen más años y "más duro"
El presidente del Eurogrupo reclama una contratación "más moderna" y retrasar la edad de jubilación
adrián legasa
madrid Aunque considera que la situación económica ha mejorado, Bruselas mantiene la presión para que el Gobierno español siga haciendo recortes en el mercado laboral. Tras celebrar el éxito de las ayudas a la banca, el presidente del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem, pidió ayer a Mariano Rajoy que retrase la edad de jubilación y facilite el acceso de los jóvenes al empleo a través de una contratación "más moderna", es decir, con menos sueldo y despido más barato. "Hay que trabajar más y más duro", resumió Dijsselbloem.
En su visita a Madrid, el líder del Eurogrupo repitió el patrón al que recurren últimamente los líderes europeos para referirse a España: tras la palmadita en la espalda al Gobierno, sacan la lista de deberes. Dijsselbloem hizo hincapié en dos de los puntos críticos de la economía española, el paro y el sistema de pensiones, en ambos casos para pedir profundizar en recetas ya conocidas.
Por un lado, el presidente del Eurogrupo hizo referencia al elevado paro juvenil, en el entorno del 60%, y se mostró partidario de dotar de "más dinamismo" al mercado de trabajo español con un modelo de contratación "más moderno", un eufemismo para hablar de empleo precario con menor seguridad y salarios más bajos. "El desempleo es muy alto, sobre todo para los jóvenes, y hacen falta más reformas laborales", afirmó Dijsselbloem confirmando que en Bruselas nadie ha quedado satisfecho con la última reforma.
A pesar de tratarse de una reforma profunda y completa, que de hecho va camino de transformar de arriba a abajo las relaciones laborales en Euskadi, la Comisión Europea y otros agentes macroeconómicos insisten en que la vía para reducir el desempleo en España es seguir bajando los costes laborales para incentivar la contratación. En este contexto no faltan propuestas como la lanzada en verano por el FMI de reducir un 10% los salarios o la formulada por el Banco de España de permitir la contratación de jóvenes por menos del Salario Mínimo InterProfesional. La patronal española, cómoda en este debate, tiene sobre la mesa una serie de medidas que transmitirá a Rajoy entre las que figura ampliar el periodo durante el que el trabajador no tiene derecho a la paga por despido.
Aunque está preparando una reducción de los modelos de contrato, de momento el Ejecutivo popular ha rechazado aceptar este tipo de sugerencias, y lo cierto es que tiene motivos para no volver a revolver la legislación laboral. Un año y medio después de su aprobación, la reforma de Rajoy presenta aún muchas lagunas y de hecho aún no está claro que pueda aplicarse en toda su dimensión. Algunas cuestiones, como el límite de un año en la ultraactividad de los convenios o la nueva regulación de los despidos, están siendo rechazadas en los tribunales. Otros puntos, como el arbitraje obligatorio en caso de que una empresa quiera modificar condiciones laborales, también presentan dudas jurídicas. Y eso por no entrar a valorar el escaso efecto de la reforma sobre las cifras del paro, que apenas se contienen por efectos estacionales.
El presidente del Eurogrupo afirmó ayer que España está en disposición de poner rumbo a la recuperación incluso habló de los beneficios de invertir en firmas españolas. Valoró positivamente que los 40.000 millones de euros concedidos a los bancos a través del programa de rescate europeo -la banca española ha recibido más de 60.000 millones en ayudas públicas desde 2009- han generado un efecto positivo de manera que el sistema financiero no necesitará más dinero.
Pero la mejoría económica no se traduce en mejores condiciones de trabajo. Además de pedir una contratación más flexible, Dijsselbloem insistió en la necesidad de retrasar la edad de jubilación para reducir las cargas de la Seguridad Social. El PP prevé aprobar antes de fin de año un severo ajuste de las prestaciones mientras la edad de jubilación será de 67 años en 2027 por la reforma del anterior Gobierno de Zapatero.
Mariano Rajoy gesticula mientras conversa ayer con el presidente del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem. Foto: afp
Reunión hoy para fijar cambios en la Ley de Cajas
PP, PSOE, CiU y PNV quedaron ayer emplazados a una reunión hoy con el objetivo de acercar posturas sobre los cambios que se introducirán finalmente en el proyecto de Ley de Cajas de Ahorros y Fundaciones Bancarias, que será aprobada de forma definitiva mañana en la Comisión parlamentaria de Economía. Fuentes de las diferentes formaciones explicaron que los populares han pospuesto hasta esta reunión la inclusión en el proyecto de ley de la quincena de enmiendas que han presentado, para dar tiempo para tratar de acordar posturas comunes. El objetivo principal de las enmiendas del PNV es poder preservar en la nueva ley la obra social que vienen realizando las cajas vascas.