Bruselas. Mario Draghi, presidente del Banco Central Europeo repitió ayer que la eurozona precisa un mecanismo de resolución bancaria lo antes posible y lo hizo desde Berlín. En la capital alemana, el dirigente trató de aplacar el escepticismo que genera la unión bancaria entre empresarios y banqueros germanos, y sobre todo en el Gobierno y el Bundesbank.

En un selecto foro sobre el euro organizado por la patronal alemana, Draghi desgranó las ventajas que a su juicio aportarán a la eurozona el supervisor bancario único y el organismo común de resolución bancaria. "Necesitamos un supervisor bancario único pronto", aseguró. Un organismo que sirva para detectar rápidamente desequilibrios en entidades crediticias y para acelerar la recuperación tras una crisis financiera.

Para Draghi la unión bancaria es uno de los dos elementos esenciales, junto a una "más completa unión monetaria", para lograr una "arquitectura más fuerte" para la Unión Económica y Monetaria.

"La unión bancaria debería ayudar a acelerar la reparación de los bancos. Esto será así si, como espero, acabamos contando con un fuerte mecanismo único de resolución", indicó. A su juicio, la unión bancaria servirá "para reactivar el crédito a la economía real", una "prioridad clave" para promover el crecimiento y la creación de empleo lastrada ahora por la "actual falta de transparencia sobre los balances bancarios". Para Draghi, las decisiones políticas y del BCE han ayudado a estabilizar la eurozona, pero instó a los países del euro a seguir con los "esfuerzos de consolidación" y las "reformas estructurales" para mejorar la competitividad. >DNA