vitoria. El Gobierno Vasco puso ayer en marcha el Instituto Vasco de Finanzas (IVF) con el nombramiento de su director, Josu Iñaki Garay. Su función principal será centralizar las líneas de crédito para financiación de pymes y, por ello, la patronal vasca, Confebask, celebró el relanzamiento de una institución que ha permanecido en letargo los últimos años por las reticencias a activarlo del anterior Ejecutivo socialista. El Gabinete de Patxi López aparcó la iniciativa diseñada por el último gobierno de Juan José Ibarretxe tras vincularlo a las aspiraciones nacionalistas de mayores cotas de autogobierno. A sus ojos era un Banco Central Vasco sin ninguna autoridad en el ámbito monetario, propiedad exclusiva a día de hoy del Banco Central Europeo. No le vieron mayor utilidad y lo aparcaron en un cajón.
Una de las primeras decisiones del actual consejero de Hacienda y Finanzas, Ricardo Gatzagaetxebarria, fue focalizar todos los esfuerzos de apoyo a la financiación empresarial y para ello apostó por la figura del Instituto de Finanzas, cuya estructura estaba ya definida.
La ventanilla estará abierta a partir del próximo lunes, cuando Josu Garay tomará posesión efectiva de su cargo, después de la publicación ayer en el Boletín Oficial de su nombramiento. Garay, licenciado en Ciencias Económicas y Empresariales, era hasta ahora director general de la Fundación Miranda, un centro de asistencia sanitaria de Barakaldo. Fue director de Financiación y Contratación del Gobierno Vasco (2005-2009) y director general de Osakidetza (2001-2005).
El IVF tendrá capacidad para conceder o instrumentar créditos a favor de entidades y empresas y prestar apoyos financieros a sociedades o fundaciones que faciliten la liquidez o la promoción de empresas no financieras. También trabajará junto a las sociedades de garantía recíproca para fortalecer la estructura económica de las empresas o propiciar nuevas inversiones. Y tendrá margen de maniobra para participar en la promoción económica mediante la toma de participaciones en empresas. El Instituto de Finanzas será por ejemplo el encargado de gestionar el crédito de 150 millones de euros concedido recientemente al Ejecutivo por el Banco Europeo de Inversiones precisamente con el objetivo de mejorar la liquidez de las empresas, una de sus principales demandas al sector público.
Para reforzar ese papel de mediación entre empresas, entidades crediticias y sociedades avalistas, el consejo de administración del IVF contará con la presencia de altos cargos de las consejerías de Hacienda y de Desarrollo Económico, con sus máximos responsables, Ricardo Gatzagaetxebarria y Arantza Tapia, al frente. Junto a ellos, tomarán parte en las decisión del Instituto el viceconsejero de Industria, Juan Ignacio García de Motiloa, y los viceconsejeros de Economía, Pedro Hernando, y de Hacienda, Juan Miguel Bilbao. El consejo se completará con dos directores de cada Departamento.
lehendakari En Radio Euskadi, Iñigo Urkullu aclaró las intenciones de su Ejecutivo. Así, aseguró que se ha llegado ha catalogar el Instituto de Finanzas "como si fuera el embrión del banco público", pero "no se trata de esto, sino de que todo lo que son los instrumentos financieros que tiene el Gobierno Vasco se puedan concentrar de tal manera que el Instituto Vasco de Finanzas".
El lehendakari comparó el IVF con organismos como el Instituto de Crédito Oficial (ICO) y explicó que se persigue "desde la propia administración vasca y desde el Gobierno Vasco tengamos un instrumento financiero que sea capaz de dotar también de crédito a las inversiones que otros agentes quieran realizar".
Confebask, por su parte, valoró "positivamente" la reactivación de un "instrumento esencial en la aportación de soluciones financieras integrales a la economía", al ser "una herramienta fundamental para atender el grave problema de financiación". Añadió que se trata de un instrumento "reiteradamente solicitado por Confebask y que ya formaba parte de las medidas propuestas" en el Plan de Choque planteado por esta organización en 2008, "con motivo del estallido de la crisis financiera". Los empresarios recordaron que el instrumento permaneció en suspenso la pasada legislatura.