BILBAO. La CAV está perdiendo trabajadores extranjeros de forma incesante durante la crisis, pero el ritmo de destrucción de empleo en este colectivo se ha disparado este año y ni la campaña turística de verano ha conseguido frenar la tendencia. El número de afiliados a la Seguridad Social foráneos en la Comunidad Vasca se situó en julio en 49.570 personas, casi 3.800 menos que en el mismo mes de 2012.
Se trata del mayor retroceso interanual (-7%) de toda la crisis. Se produce además en un mes tradicionalmente bueno para la contratación de personal en líneas generales y en el que muchos trabajadores extranjeros encuentran un puesto en la hostelería o en el sector hotelero, donde trabaja el 20% de los emigrantes. El máximo de cotizantes foráneos se alcanzó en la CAV en julio de 2008, cuando se rozaron los 55.000 empleos.
La cifra ha caído desde entonces en 5.379 personas y la mayoría de ellos han perdido su empleo en los últimos doce meses, sobre todo a partir del final de la campaña turística del año pasado. Se han perdido en términos interanuales más de 2.000 afiliados extranjeros cada mes desde noviembre, y por encima de los 3.000 desde mayo, hasta los 3.796 de julio. La dinámica es muy similar en Nafarroa, donde incluso el ritmo se ha acelerado más que en la CAV, con una caída de 2.908 cotizantes foráneos respecto a 2012, un 12% menos.
En el conjunto del Estado ocurre lo mismo. A 31 de julio había 1.632.903 afiliados extranjeros en la Seguridad Social, 132.029 menos que doce meses antes (-7,43%). Como sucede con la CAV, el descenso porcentual de cotizantes de otros países duplica el del conjunto del sistema. El Gobierno español puso ayer el acento en esa cuestión a la hora de valorar los datos y destacó que "la pérdida de empleo continúa afectando con mayor intensidad a los trabajadores extranjeros que los nacionales".
incentivos al retorno El viaje de ida y vuelta de muchos emigrantes queda reflejado en las estadísticas. También tiene eco en la frase del Ministerio de Empleo, que pone de manifiesto a su vez que tanto el Ejecutivo de Rajoy como el de Rodríguez Zapatero han apostado por que sean los ciudadanos del Estado los que accedan a los escasos puestos de trabajo disponibles.
De hecho, el mecanismo que desde septiembre de 2008 permite a los extranjeros cobrar íntegro el paro si vuelven a su lugar de origen marca un punto de inflexión en la pérdida de empleo extranjero. Las estrecheces del mercado laboral, junto a la posibilidad de regresar a su país con dinero para empezar de nuevo, han sacado del sistema a cientos de miles de trabajadores que en algunos casos incluso han forzado el fin del contrato ante las escasas expectativas que intuían.
Esa tendencia se ha reforzado en este ejercicio mes a mes en la CAV con la excepción de mayo y junio. Tras alcanzar un mínimo histórico de 48.876 cotizantes extranjeros en abril -un nivel de finales de los noventa-, la estadística se enderezó justo antes del verano, pero no ha resistido la discreta campaña turística de este curso.
Un trabajador extranjero de la construcción. Foto: david de haro
La afiliación de extranjeros a la Seguridad Social cae a niveles mínimos por la mala campaña turística
los datos
49.570
l afiliados extranjeros en la CAV. El número de trabajadores foráneos se ha consolidado este ejercicio en la CAV por debajo de los 50.000 cotizantes. El máximo histórico se marcó en julio de 2008 con casi 55.000 personas afiliadas y cinco años después apenas se superan las 49.500 personas.
l Afiliados extranjeros en julio.
200854.949
200951.720
201052.920
201154.309
201253.366
201349.570
l El peor verano de la crisis. Ni el año 2009, considerado hasta ahora el peor año en términos de empleo de la crisis, fue tan malo para la afiliación de extranjeros a la Seguridad Social como este 2013. El número de cotizantes foráneos incluso aumentó en 2010 y 2011, y en términos intermensuales ha crecido prácticamente todos los años gracias a la temporada turística.
21.212
l afiliados extranjeros en Nafarroa. En la Comunidad Foral cotizan a la Seguridad Social algo más de 21.200 extranjeros, 1.753 menos que hace un año (-12,35%).