Vitoria. Laboral Kutxa obtuvo un beneficio neto de 56,4 millones de euros en el primer semestre del año, según informó ayer la propia cooperativa de crédito en un comunicado. La propia entidad destacó ayer su capacidad de generar ingresos recurrentes "con un buen comportamiento del negocio típico bancario", en un contexto convulso, "con tipos de interés reducidos, cambios regulatorios y descenso de la actividad bancaria".
Según la entidad, el esfuerzo de dotaciones llevado a cabo en 2012 le permite ahora afrontar la cuenta de resultados de 2013 con una menor presión, lo que unido a la contención en la evolución de los gastos de personal y de administración, le ha permitido sumar beneficios.
Además, la entidad destacó que en el primer semestre, Laboral Kutxa presentó un ratio de morosidad del 7,88%, lo que le sitúa por debajo de la media del sector financiero, que al mes de mayo era del 11,31%.
No hay comparación posible con los años precedentes ya que Laboral Kutxa arrancó su actividad el pasado mes de noviembre -tras concretarse la fusión de la caja Laboral e Ipar Kutxa- y lo hizo en un entorno económico especialmente complicado para el sector financiero. En esos dos últimos meses del pasado ejercicio la entidad ganó 22 millones de euros de beneficio. En el primer trimestre de este año sumó otros 36,7 millones después de impuestos.
