MADRID. Tras cerrar la semana en el 0,535 % y a falta de tres días de negociación para que concluya el mes, el indicador marcaba una media mensual provisional del 0,524 %.
Desde el pasado junio, el euríbor ha subido apenas unas centésimas al pasar del 0,507 al 0,524 actual, pero ha perdido 0,537 puntos frente a julio de 2012 y ello implica que las hipotecas que se revisen ahora volverán a bajar.
Así por ejemplo, en el caso de una hipoteca media de 150.000 euros contratada en julio de hace un año, a un plazo de amortización de 25 años, el descuento mensual rondará los 36 euros, lo que se traduce en unos 430 al año.
El euríbor evoluciona en la misma línea que los tipos de interés, es decir, en función de las subidas o bajadas del precio del dinero en la zona euro que aprueba el Banco Central Europeo (BCE), que, en su última reunión, dejó los tipos en el mínimo del 0,5 %.
En lo que va de 2013, febrero cerró con el euríbor más alto, muy próximo al 0,6 % (0,594 %) frente al significativo descenso de mayo, el mínimo histórico del 0,484 %.
Desde 2007, el euríbor, la referencia más utilizada para el cálculo del interés de las hipotecas en España, ha oscilado entre el máximo del 5,393 %, alcanzado en julio de 2008, y el mínimo del pasado mayo.
No obstante, el nivel del euríbor no conlleva una rebaja automática en las hipotecas puesto que algunos préstamos hipotecarios están sujetos a las llamadas "cláusulas suelo", que fijan unos intereses mínimos ante un desplome del euríbor.
Unas cláusulas que las entidades ya han comenzado a retirar, tras la sentencia del Tribunal Supremo del 9 de mayo que declaraba nulas dichas cláusulas en caso de que hubiera habido falta de transparencia.
La sentencia obligaba a la banca a advertir expresamente a los clientes de que si firman un hipoteca con cláusulas suelo no podrán beneficiarse de determinadas bajadas del euríbor.
De este modo, el Tribunal declaraba la nulidad de las cláusulas en los casos en los que el cliente no haya sido debidamente informado.
En España hay casi 1,7 millones de hipotecas con cláusulas suelo, lo que supone casi una de cada tres.