MADRID. El presidente y consejero delegado de la filial cementera de FCC, José Luis Sáenz de Miera, ha destacado que sus resultados semestrales reflejan el esfuerzo realizado el año pasado en reducir costes en España y en mejorar la eficiencia de las operaciones en Estados Unidos.

El resultado bruto de explotación (Ebitda) de la compañía totalizó 25,5 millones de euros hasta junio, un 18% menos que en el primer semestre de 2012, mientras que el resultado neto (Ebit) fue de 23,5 millones de euros, en contraste con el Ebit negativo de 36,1 millones del periodo enero-junio del año pasado.

La caída del consumo de cemento en España (-24,2% hasta junio) lastró las ventas de la filial cementera de FCC en la primera mitad del año. En concreto, la compañía logró unos ingresos de 270 millones de euros en este periodo, un 20% inferiores a los del mismo periodo de 2012, correspondiendo 158 millones de euros a su actividad internacional.

Para hacer frente al retroceso de la actividad en España, el grupo revisó hace unos meses el plan de negocio que puso en marcha el pasado año, con la inclusión de nuevas medidas y ajustes. La compañía ha provisionado en sus cuentas 60,8 millones de euros para afrontar los saneamientos de activos y los gastos de reestructuración de la plantilla derivados de esta revisión.

Entre las medidas que aplicará la cementera para afrontar la caída de la actividad destacan los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) que se iniciarán en los próximos meses en algunas fábricas, cierre de plantas de hormigón, mortero y árido en España, y despidos colectivos.

En este sentido, la compañía presentó el pasado mes de junio un expediente de extinción para 318 trabajadores de las fábricas del Grupo y otro de 227 personas que afectará al personal de la estructura corporativa.

EL EQUIPO DIRECTIVO SE BAJA EL SUELDO

También se procederá a recortar la masa salarial, medida que se aplicará al equipo directivo desde el mes de julio y que llegará al resto de la plantilla en los próximos meses. La sociedad espera que estas medidas mejoren su Ebitda recurrente en unos 40 millones de euros, con un coste extraordinario de 29 millones de euros.

Además, la filial de FCC se encuentra en negociaciones para desinvertir en varios activos no estratégicos, por un importe total de unos 15 millones de euros.

Por otra parte, la cementera ha informado de que su Consejo de Administración ha nombrado, por cooptación, a Alvaro Alepuz Sánchez nuevo consejero independiente para cubrir la vacante dejada tras la dimisión de José Manuel Burgos.