BILBAO. En una conferencia de prensa en Bilbao de análisis crítico del plan de empleo del Gobierno vasco, al que ha acusado de hacer "propaganda" con este asunto, el sindicalista ha insistido en que "no es verdad" que el empleo lo creen los empresarios, al considerar que éstos, "cuando hay actividad económica producen y cuando no, echan a la gente a la calle".

"Txiki" Muñoz ha llamado a los parados a tomar parte activa en la huelga general convocada por los sindicatos nacionalistas el próximo 30 de mayo en Euskadi y Nafarroa y ha asegurado que, en contra de quien afirma que los sindicatos sólo defienden al que tiene empleo, el trabajo de los convocantes está relacionado con su preocupación por el elevado desempleo.

Según ha dicho, hoy la calle, para reclamar justicia, se configura en "un espacio más democrático que los Parlamentos, que están muy controlados para que el poder económico saque lo quiere".

Respecto a la polémica suscitada en torno al contrato único planteado para España por el comisario europeo de Empleo, Laszlo Ándor, ha considerado que se trata de "una cortina de humo con la seguridad de que más tarde o más temprano, Rajoy va a dar a la patronal española" lo que pide, en alusión a una nueva reforma laboral.

El sindicalista, que ha cuestionado la preocupación del Gobierno vasco por el paro en un contexto de "derrumbe de todo lo social y lo laboral", ha afirmado que "si no se cambian las políticas, no va a haber oportunidades para el empleo y menos para el empleo digno".

ELA entiende por políticas de empleo las encaminadas a crear trabajo de calidad y no a "bonificar el empleo precario" y para lograrlo, aboga por un cambio radical de las actuales políticas presupuestarias y fiscales.

Entre otras medidas, para procurar más empleo y en contra de la tendencia apuntada en distintos ámbitos, el sindicato defiende la reducción de la jornada laboral a las 35 horas semanales sin rebaja salarial, al considerar que hay margen para hacerlo en un momento en el que el país se sitúa "en el 'top' de la productividad", ha sostenido el responsable de la central.

Según han explicado en el mismo acto informativo los representantes de ELA Mikel Noval y Janire Landaluze, el sindicato también reclama incrementos salariales por encima del IPC y niveles dignos de coberturas sociales al entender que la creación de empleo está, asimismo, relacionada con la capacidad de compra de bienes y servicios.

Demanda, igualmente, dar marcha atrás en las reformas laborales y de negociación colectiva aprobadas en los últimos años, así como en las últimas reformas de pensiones al considerar que retrasar la edad de jubilación aumenta el paro.

Pide una política industrial que garantice la financiación de las empresas, el impulso de "empleos verdes", el desarrollo de un servicio público de empleo "potente" y el aumento del nivel de empleo público en sanidad, educación o servicios sociales.

Reclama además el establecimiento de un salario mínimo digno y de "una renta máxima autorizada" que evite la enorme concentración de riqueza.

Los sindicalistas han contrastado sus planteamientos con el plan de empleo que el Gobierno Vasco presentó el pasado 18 de marzo, dotado con 281 millones de euros de recursos públicos para este año.

Para ELA, el plan se ratifica en políticas que, a su juicio, están provocando un aumento del paro y su contenido no es realista, no es creíble y es continuista respecto a programas que ya existían.

El sindicato también reprocha que se obvie la política de amortizaciones, reducción de empleo temporal, no sustituciones y subcontratas desarrollada por "el Gobierno vasco como empleador".