VITORIA. El Gobierno Vasco anunció ayer su intención de regularizar la situación laboral del personal auxiliar que tramita desde diversas oficinas de Lanbide la denominada Renta de Garantía de Ingresos, conocida por sus siglas, RGI. De esta forma, el Ejecutivo jeltzale dará estabilidad laboral a los veintiún trabajadores públicos -actualmente adscritos a Lanbide- cuyos contratos finalizaban en próximas fechas -entre mayo y septiembre de este año-, según anunció ayer el propio Gobierno a través de un comunicado público.

El Gobierno Vasco opta así por dar cobertura jurídica y regularizar la situación de estos trabajadores que veían como la fecha tope de sus contratos se acercaba porque considera que "sus puestos de trabajo son necesarios mientras duren las necesidades de urgencia de los solicitantes de esta prestación", según explicó en el anuncio de ayer.

El Consejo de Gobierno estudiará -y en su caso aprobará- en su próxima reunión, prevista para mañana martes la propuesta de acuerdo para la creación del "Programa de apoyo a la implantación del nuevo modelo de gestión y tramitación de la Renta de Garantía de Ingresos y de adscripción de personal para su desarrollo". Un nuevo plan que permitirá dotar a estos empleados de esa nueva estabilidad y dará al tiempo garantía al propio programa de la RGI. Gracias a esta propuesta, los veintiún operarios afectados pasarán a ser funcionarios interinos de manera que podrán continuar prestando el servicio "mientras sea necesario", según fuentes de Lakua.

La situación de crisis económica y de desempleo ha prolongado la prestación de este servicio, por lo que el Gabinete de Urkullu ha optado ahora por poner en marcha este nuevo programa temporal de implantación de un nuevo modelo de tramitación que incluye esa garantía para los propios trabajadores que atienden a las personas que buscan asesoramiento. La RGI es una prestación económica mensual diseñada para atender las necesidades básicas de las personas y familias que no disponen de recursos suficientes que además tiene como objetivo ayudarles a encontrar una salida laboral. Los perceptores pueden ser personas sin trabajo, trabajadores con pocos recursos, pensionistas, perceptores de otro tipo de pensiones, o inmigrantes sin permiso de residencia, entre otros.

La plantilla de trabajadores públicos que gestionan la RGI comenzó a trabajar gracias a un programa experimental previo a la transferencia de las políticas activas de empleo a la Comunidad Autónoma de Euskadi, según recordó ayer el propio Ejecutivo vasco.