BILBAO. El presidente y consejero delegado de la empresa eólica Gamesa, Ignacio Martín, ha pedido hoy a los políticos hablar con "claridad" a los ciudadanos, "y no pensar en el voto", y hacerles ver que hay que "rebajar las cotas del estado de bienestar", pese a que sea un mensaje impopular.
Martín ha transmitido este mensaje durante una conferencia-coloquio organizada por La Comercial de Deusto en la sede de la Sociedad Bilbaína.
"Hay que rebajar el estado de bienestar, sin duda. Pero políticos, señores, tienen que decirlo con claridad y no pensar en el voto y en lo que les va a pasar", ha emplazado Martín al Gobierno y a los partidos.
El presidente de Gamesa ha considerado de "perogrullo" que el actual nivel social debe ajustarse debido a la actual situación económica.
"A todos nos gustaría irnos de vacaciones todos los años un mes al Caribe, pero resulta que a lo mejor, si vienen mal dadas, no hay que ir al Caribe, aunque sí hay que tener los medios suficientes para poder sobrevivir y pasar la crisis dignamente", ha comentado.
Sin hablar del Gobierno central o del vasco, Martín ha añadido: "Cuando hay una alternancia en el poder y alguien tiene mayoría, tiene el crédito para decir eso. Pues hay que hacerlo".
El presidente de Gamesa también ha defendido las ventajas que ha traído el cambio de legislación del mercado de trabajo.
REFORMA LABORAL
A su juicio, España "está ganando productividad fruto de una reforma laboral que ha posibilitado hacer ajustes". "No hay que tener miedo de decirlo. Este país lo necesitaba", ha añadido.
Martín ha reprochado también a los partidos que en el actual contexto, no sean capaces de sentarse a dialogar y buscar consensos, en vez de tomar decisiones antagónicas cuando hay cambio de poder.
"Todos estamos metidos en el barco. De esta se sale remangándose y trabajando. La fase de buscar culpables está durando más de la cuenta, y eso no puede ser", ha advertido.
"Un poquito de seriedad. Tengamos consenso en los temas de fondo y trabajemos juntos", ha subrayado.
Como natural de Gipuzkoa, Martín ha puesto el ejemplo de este territorio, donde gobierna Bildu, y donde, a su entender, "todo está mucho más atomizado".
"Me da envidia Bizkaia. Tenemos lo que tenemos (en Gipuzkoa) y la oposición no es capaz de ponerse de acuerdo para hacer cosas, lo cual es tremendo y es duro", ha criticado.
El presidente de Gamesa ha advertido de que esta falta de visión de pactos puede ser un "lastre" para la recuperación. "La mochila política la arrastraremos y nos influirá un montón desgraciadamente", ha señalado.
MARCA ESPAÑA
Sobre la "Marca España", ha admitido que "tiene sentido" tratar de recuperar el prestigio internacional, pero ha apuntado que también es un obstáculo para empresas como Gamesa que buscan incrementar sus negocios en el exterior.
Ha confesado que fondos de inversión extranjeros han rechazado hacer negocios con Gamesa por ser española y que han tenido que pedir créditos con avales de bancos de fuera al no admitir los de entidades financieras nacionales.
Por ello, ha manifestado la necesidad de hacer un "esfuerzo de credibilidad espectacular" y de que España "no sea una república bananera".
"Oímos hablar de Argentina, de Bolivia... Y nosotros estamos tomando determinadas medidas que a lo mejor son necesarias, pero mal transmitidas y con demasiados vaivenes que hacen que la credibilidad esté en entredicho", ha opinado.
Martín ha vaticinado que en el primer trimestre de 2014, habrá signos de recuperación y se ha mostrado convencido de que la mejora será más rápida en Euskadi.
PLAN DE AJUSTE
Se ha referido a la situación de Gamesa después del plan de ajuste que le ha llevado a cerrar 2012 con unas pérdidas de 640 millones de euros como consecuencia de un saneamiento de su balance y el despido de algo más de 300 personas con acuerdo sindical.
Martín, quien asumió la dirección de Gamesa en mayo de 2012, se ha mostrado convencido de que su empresa, que ha salido del Ibex 35, ha pasado a tener un volumen acorde a lo que es después de una expansión desproporcionada.
"Gamesa estaba empezando a actuar como si fuera una compañía grande. Error, no nos lo podíamos permitir. Somos y queremos ser una gran compañía, pero no una compañía grande".
"No tenemos negocio como para poder soportar eso. Somos una compañía austera, realista, guipuzcoana, no sé, hay un estilo una forma de hacer que marca impronta, no quiero ser peyorativo diciendo que al otro de la muga (frontera) se es distinto. Menos Audis... nos entendemos", ha dicho con tono irónico.
"Nuestra credibilidad ha ganado enteros", se ha mostrado convencido a la vista del resultado del plan de ajuste.