madrid. El déficit del Estado alcanzó los 45.910 millones de euros entre enero y noviembre, equivalentes al 4,37% del PIB, lo que supone cinco décimas menos respecto al registrado en el mismo periodo de 2011, anunció ayer la secretaria de Estado de Presupuestos, Marta Fernández Currás.
No obstante, subió algo más de dos décimas respecto al déficit acumulado hasta octubre, que fue del 4,13% del PIB.
La secretaria de Estado explicó que noviembre es un mes complicado tanto por el lado de la recaudación, ya que no se producen ingresos significativos, como por el lado del gasto, ya que se concentra una gran porcentaje de ejecución del presupuesto.
Según dijo, el dato de noviembre es compatible con el objetivo del Gobierno de lograr un 4,5% del PIB de déficit para la Administración central y la Seguridad Social en el conjunto del año, puesto que en diciembre entrarán plenamente en vigor las medidas de ahorro puestas en marcha por el Gobierno, puesto que no se pagará a los funcionarios las extra de navidad.
Los ingresos no financieros, antes de descontar la participación de las administraciones territoriales, aumentaron en los once primeros meses del año un 18,9%, hasta 195.142 millones.
La recaudación procedente de impuestos alcanzó los 152.727 millones, el 1,1% más que un año antes.
Los ingresos por IRPF sumaron 65.910 millones, el 1% más que hace un año, mientras que los procedentes del IVA fueron de 47.216 millones, el 1,9% menos, si bien supone una moderación respecto al ritmo de caída del entorno del 10% que se dio en la primera parte del año.
La menor caída de la recaudación del IVA es consecuencia no sólo de la subida de tipos impositivos en septiembre, sino también por el importante crecimiento de los ingresos de los aplazamientos de periodos anteriores.
Sólo en noviembre, la recaudación por IVA creció el 27,1% respecto al mismo mes del año anterior, hasta los 3.351 millones.
El Impuesto de Sociedades ingresó 17.190 millones, el 17,7% más, como consecuencia de las modificaciones normativas respecto a los pagos fraccionados, unos cambios que han permitido ingresar 2.103 millones hasta noviembre.
Los pagos por intereses de la deuda han crecido el 16,3% (25.537 millones) y las transferencias corrientes han aumentado de 72.905 a 75.217 millones.