La última reunión del OCT celebrada ayer volvió a saldarse sin acuerdo sobre el anteproyecto para un nuevo Impuesto de Patrimonio elaborado por la Diputación de Bizkaia y que no contó con un informe favorable. Todas las instituciones presentes se abstuvieron, por lo que el nuevo impuesto estará "desarmonizado". Según la Diputación vizcaína, el anteproyecto ha sido mejor valorado por el Gobierno y el Ejecutivo foral de Álava que el Impuesto sobre la Riqueza y las Grandes Fortunas que se tramita en Gipuzkoa.