Vitoria, 19 nov (EFE).- El PP en las Juntas Generales de Álava ha modificado su voto y ha impedido junto al PNV que se apruebe un acuerdo alcanzado en comisión para rebajar el límite de exención del Impuesto de Actividades Económicas (IAE) de dos millones de euros a 1,1.

El pasado 8 de noviembre, todos los partidos con representación en las Juntas alavesas, PP, PNV, Bildu, PSE-EE y EB, respaldaron en el seno de la comisión de Hacienda esta rebaja presentada a propuesta de Bildu y que contaba con una enmienda de aproximación introducida por los populares.

La modificación tenía por objeto, según defendía Bildu, que los ayuntamientos pudieran recaudar este impuesto a aquellas empresas con un volumen de facturación superior a 1,1 millones de euros, en lugar de los dos millones fijado ahora como límite.

La pasada semana, el PNV ya aclaró a través de su portavoz en las Juntas alavesas, Ramiro González, que su intención en el Pleno que se ha celebrado hoy era votar en contra de ese acuerdo, algo que también ha hecho esta mañana el grupo popular.

La negativa de ambos ha impedido que el dictamen de la comisión de Hacienda fuera aprobado ya que sólo ha contado con los votos a favor de PSE, EB y Bildu, que han sumado 21, frente a los 27 de PP y PNV.

El portavoz del PP en esta cámara, Santiago Abascal, ha justificado su decisión en el hecho de que durante estas semanas su partido ha recibido peticiones por parte de diversos ayuntamientos explicándoles que con esa modificación se iba a perjudicar a las empresas y a la larga también a ellos.

"Es peor el remedio que la enfermedad", ha asegurado Abascal, quien ha explicado que tanto la decisión de apoyar en comisión la modificación como el hecho de cambiar ahora su voto es algo "democrático". "Creo que hemos hecho lo correcto y lo hemos hecho bien", ha resumido.

González por su parte ha dejado claro que en la comisión no se votó el dictamen y que su grupo se limitó a apoyar la enmienda introducida por el PP a la propuesta inicial de Bildu porque la mejoraba, pero ha insistido en que ya advirtió de que se trataba de una "medida equivocada" que iba a perjudicar a las "pequeñas empresas".

Desde el PSE, su portavoz, Jesús María López Ubierna, ha censurado la actitud de PP, que en su opinión se ha plegado a los "intereses del PNV" y ha hablado de "perversión democrática" y de "trágala".

En la misma línea se ha manifestado el portavoz de Bildu, Gorka Ortiz de Guinea, quien ha calificado la situación de "escándalo" y de "falta de seriedad" y ha tachado a PNV y PP de actuar como "monaguillos de la patronal".

También ha indicado que con la modificación que se pretendía las empresas que facturan entre cinco y seis millones de euros tendrían que pagar 1.000 euros más al año, cuando cualquier funcionario va a sufrir una pérdida mayor con la supresión de la paga extraordinaria.

La representante de EB Nerea Gálvez ha insistido en que, aunque no se votó el dictamen en comisión, sí "se votó un acuerdo" para rebajar la exención a 1,1 millones por "unanimidad".

Además, ha lamentado que PNV y PP hayan sumado sus votos "respondiendo a las peticiones de la patronal".

La patronal alavesa (SEA), que había pedido a los partidos políticos que no aprobasen en Pleno la modificación, se ha mostrado satisfecha por lo acordado hoy en una nota de prensa.

En opinión de SEA, "es una buena noticia para las empresas y el empleo" porque dada la "delicada situación económica", el "impacto de esta modificación hubiera sido concluyente sobre el mantenimiento empresarial y el empleo". EFE