Vitoria. La Diputación de Álava mantiene contra viento y marea -en este caso, contra el criterio de la oposición en pleno y de sus homólogas vizcaína y guipuzcoana- su intención de suprimir la paga extra de Navidad de los funcionarios forales del territorio, consecuencia de la aplicación del decreto aprobado en julio por el Gobierno de Mariano Rajoy sobre medidas para la contención del déficit público. Las Juntas Generales alavesas aprobaron ayer una iniciativa presentada por el PNV, que contó con el respaldo de toda la oposición -Bildu, PSE y EB-, en la que se insta al Ejecutivo de Javier de Andrés a no aplicar este recorte.
También fueron los dieciséis junteros del PP los únicos que se opusieron a una enmienda de adición presentada por el PSE en la que reclaman a la Diputación que, de manera conjunta con el Gobierno Vasco y el resto de administraciones públicas vascas, impulse iniciativas institucionales y jurídicas para la no aplicación de las medidas dictadas por el Gobierno de Mariano Rajoy relativas a los empleados públicos.
Durante el Pleno, la procuradora del PP Ana Morales explicó que la retirada de la paga extra de Navidad a los funcionarios forales alaveses es una medida "dolorosa pero puntual" y advirtió al resto de grupos que plantean "lo imposible". En este sentido, Morales apeló a un debate "sereno y prudente" porque, a su juicio, el decreto de julio del Gobierno de Rajoy que obliga a suprimir esta paga a los empleados públicos es "de obligado cumplimiento".
Ramiro González (PNV) consideró que la Diputación alavesa "disfruta" aplicando las medidas de Rajoy porque son los primeros en hacerlo y opinó que "no es temerario defender la aplicación del autogobierno vasco" para no secundar medidas "recentralizadoras". Jesús López Ubierna (PSE) criticó que se haya hurtado el debate a las Juntas Generales de Álava antes de adoptar la medida y reclamó a la Diputación alavesa que no se quede sola en la aplicación de las medidas de Rajoy.
