BILBAO. Después de que las Asambleas Generales de las dos entidades aprobaran el pasado 30 de junio las propuestas de integración presentadas por los respectivos Consejos Rectores, esta mañana ha concluido el proceso que iniciaron e pasado mes de marzo para constituirse como una única cooperativa.

A partir de ahora, la nueva entidad deberá proceder a las correspondientes tramitaciones e inscripciones registrales para que la integración operativa total se lleve a cabo durante el próximo ejercicio 2013.

El proyecto cooperativo se constituye "con el firme compromiso de impulsar un modelo de hacer banca soportado en los valores y principios del cooperativismo, el arraigo y compromiso social y con el objetivo de ser un agente activo para la recuperación económica", según han explicado.

El Plan de Integración cuenta ya con el visto bueno de la totalidad de los organismos competentes y contempla escenarios de estrés con condiciones económicas especialmente adversas, habiéndose validado la capacidad de la entidad de hacerles frente, dado el notable punto de partida en términos de solvencia, liquidez, eficiencia y morosidad.

La nueva entidad ha expresado su compromiso con el mantenimiento de los puestos de trabajo y condiciones de sus empleados, mediante la incorporación de las mismas como socios del proyecto cooperativo y "los posibles ajustes que el nuevo proyecto requiera, serán gestionados desde la voluntariedad y el acuerdo, mediante los planes de dinamización que han sido ya pactados".

MODELO ALTERNATIVO La nueva entidad estará presidida por Txomin García -actual presidente de Caja Laboral-, gestionará unos activos totales superiores a los 25.000 millones de euros, con lo que se convertirá en la segunda entidad financiera del País Vasco -tras Kutxabank- y tendrá 1.300.000 clientes.

La integración, según informaron sus responsables recientemente, pretende potenciar un proyecto de entidad financiera de economía social orientada a proveer de servicios financieros y de aseguramiento a los mercados en los que opera, "pero basándose en un modelo alternativo al resultante del actual proceso de bancarización del sistema financiero".

Además, el proyecto cooperativo mantendrá también la "implicación con los sectores industrial y agroalimentario, aprovechando el conocimiento de las dos entidades que le han dado origen".

El domicilio social se ubicará en Arrasate-Mondragón, mientras que en la actual sede social de Ipar Kutxa en Bilbao se establecerán la subsede operativa de la red comercial de banca minorista y de su comité de negocio, así como la dirección territorial correspondiente y sus estructuras de apoyo.

En Bilbao, además, se mantendrán las actuales sedes sociales de Seguros Lagun Aro, de la sociedad de cartera y de las gestoras.

La nueva entidad prevé alcanzar "cuotas de mercado significativas" en el panorama bancario de Euskadi y Navarra, con más de 750.000 clientes en Euskadi, 110.000 en la Comunidad foral y un total de 1.300.000 clientes incluyendo el resto de comunidades en las que opera Caja Laboral.