bruselas. Las reformas emprendidas por España en el sector financiero avanzan "a buen ritmo" y, unidas a una mejora en los mercados, permiten que el programa de recapitalización de la banca apunte a "un éxito", anunciaron ayer la Comisión Europea (CE), el Banco Central Europeo (BCE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI). Bruselas y Fráncfort hicieron público el primer análisis sobre la marcha del rescate bancario español y sobre el cumplimiento por parte del país de los términos acordados con sus socios para obtener un crédito de hasta 100.000 millones. Según el vicepresidente económico de la Comisión Europea, Olli Rehn, se trata de una "evaluación positiva", que supone "otro paso más hacia el arreglo y la reforma del sistema bancario español".

El dictamen de las instituciones europeas se basa en las conclusiones de una misión de expertos enviada a Madrid entre el 15 y el 26 de octubre, que "mantuvo intensas y productivas conversaciones con las autoridades españolas" y "obtuvo una actualización detallada de la situación macroeconómica de España y del rendimiento actual de todos sus grandes bancos". La conclusión es que "las condiciones generales del mercado financiero han mejorado desde el inicio del programa y los problemas de financiación se han reducido".

cifras Sin embargo, la CE y el BCE advierten de que "los desafíos para una parte del sector bancario siguen siendo importantes y requieren una acción política decisiva, como se señala en el Memorando de Entendimiento". Se refieren ambas instituciones a que el Gobierno finiquite aquellas entidades deficitarias y no sostenibles.

El análisis coincide con las consideraciones hechas públicas también ayer por el FMI, que presta apoyo técnico a las instituciones europeas en el programa de asistencia español. Según la institución que dirige Christine Lagarde, se han logrado "avances significativos" en el sistema financiero, pero quedan "por delante retos difíciles". Entre esos retos, el FMI también señala que se deben liquidar los bancos no viables "tan pronto como sea posible", pero también "evitar nuevas fusiones que no generen valor de manera clara y restricciones excesivas sobre la oferta de crédito a nivel del sistema".

Según lo previsto, las primeras inyecciones de capital europeo llegarán en noviembre e irán a las entidades nacionalizadas, es decir, Bankia, Catalunya Caixa, el Banco de Valencia y Novagalicia. Estos bancos necesitan, según la consultora estadounidense Oliver Wyman, más de 46.000 millones de euros, de los que 25.000 millones corresponden a Bankia. El primer tramo del préstamo puede alcanzar los 45.000 millones, según lo pactado.