Donostia. Los ingresos de la Hacienda guipuzcoana hasta el mes de agosto cayeron un 1,9% respecto al mismo periodo del año pasado y solo dos décimas respecto a julio, un descenso que la diputación que gobierna Bildu considera que no es significativo teniendo en cuenta el entorno de crisis económica general. Sin embargo, en ese retroceso, que significa recaudar 41 millones de euros menos que en los ocho primeros meses de 2011, tiene mucho que ver la notable disminución del dinero proveniente del IVA, que acumula un retroceso del 18% en lo que va de ejercicio, lo que traducido en euros, suponen 121 millones menos.

Únicamente el buen comportamiento que registró el IRPF durante la campaña 2011 y la recuperación del Impuesto de Patrimonio han logrado frenar lo que podía haber sido un desastre recaudatorio. Hasta el momento, Gipuzkoa ha ingresado por tributos concertados 2.109 millones de euros frente a los 2.150 millones registrados entre enero y agosto del año anterior. De esa cantidad, el IRPF representa el 40%.

El hecho de que la recaudación por este último impuesto experimente a estas alturas del año una subida del 1,8% apunta a un mantenimiento de la capacidad de renta de los guipuzcoanos. De hecho, las retenciones por rendimientos de trabajo aumentan a pesar de la crisis. Los contribuyentes han apostado por el ahorro y un buen indicador es que las retenciones por rendimientos de capital mobiliario han crecido un 14% que, en valores absolutos, conlleva un alza de 6,6 millones.