madrid. El presidente de Francia, François Hollande, mostró ayer su confianza en que los líderes de la Unión Europea lograrán alcanzar en la próxima cumbre europea -prevista los días 18 y 19 de octubre- soluciones para Grecia y España. A este respecto, el presidente francés subrayó que los elevados intereses que pagan por su deuda países como España no están justificados y deben ser puestos bajo control. Y es que las tensiones siguen presentes en los mercados, aunque ayer la prima de riesgo española se enfrió desde los 550 puntos básicos del lunes hasta los 517. Todo porque los inversores confían en que el BCE de el visto bueno a su intervención en los mercados este jueves, dando pie a la compra de bonos soberanos de países en problemas.

Ayer, al respecto, Hollande aseguró que "intervenir forma parte del papel de aquellas instituciones involucradas en la zona euro, particularmente del BCE".

El mandatario galo se reunió con el primer ministro italiano, Mario Monti, en Roma, dónde ambos coincidieron en la necesidad de que la Unión Europea y los mercados reconozcan los esfuerzos realizados por cada país para afrontar la crisis de la deuda. "Hemos constatado que hacer los deberes en casa es necesario, pero no es suficiente, ya que a medida que se realizan progresos en la política económica se necesita un reconocimiento de la UE y de los mercados para que no persistan obstáculos en la prima de riesgo", explicó Monti.

Hollande añadió que Monti y él coincidieron en que las tres etapas cruciales a las que se enfrenta la eurozona ahora son "aplicar las decisiones adoptadas en el Consejo Europeo del 28 y 29 de junio", lograr "resolver la situación en Grecia y España" y avanzar en la "unión bancaria y monetaria".

España, a la espera Por su parte, el Gobierno español se mantiene a la espera de ese encuentro del BCE, previsto para mañana. El ministro español de Economía, Luis Guindos, aseguró ayer que España esperará al desarrollo de los acontecimientos futuros antes de tomar ninguna decisión sobre la solicitud de rescate, paso necesario para que el BCE compre deuda española, según su presidente, Mario Draghi. "Primero hay que aclarar las condiciones. La reunión del consejo del BCE esta semana y la reunión informal del Eurogrupo la próxima traerán claridad al respecto", aseguró, en una entrevista concedida a un diario alemán.