Madrid. Bruselas tendrá que dar el visto bueno a cada pacto que alcancen las entidades financieras intervenidas (Bankia, Novacaixa Banco, Banco de Valencia y Caixa Catalunya) para resarcir a los afectados de participaciones preferentes. Así lo reveló ayer el ministro de Economía, Luis de Guindos, durante una reunión del equipo económico del PP, en la que destacó que el real decreto-ley que el Gobierno aprobará mañana para sanear la banca no incluirá una solución para compensar a los afectados de preferentes de las entidades controladas por el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB).

Aunque la nueva norma contempla la posibilidad de que se apliquen quitas, el sector financiero ha interpretado que esa opción sólo será aplicable a quien quiera recuperar su dinero de forma inmediata, ya que existe la posibilidad de que se canjeen preferentes por depósitos o bonos, con los que los ahorradores podrían recuperar el 100% de lo invertido.

Según fuentes del PP consultadas por Efe, De Guindos aseguró asimismo que el futuro banco malo, que permitirá aislar los activos tóxicos de las entidades financieras, no supondrá "nunca" un coste para el contribuyente. Esa sociedad, cuyo marco general de funcionamiento se aprobará con el real decreto-ley de saneamiento del sector financiero, comenzará a funcionar en el mes de noviembre, según dejó entrever De Guindos. La regulación concreta del banco malo se concretará en otoño, cuando se acuerden las fórmulas de financiación por parte del BCE o el precio al que se transfieran los activos.

Antes de entrar en la reunión con el equipo económico del PP en la sede del partido de la calle Génova, el ministro consideró que la nueva normativa es "el mayor avance que se ha producido en muchos años" en España, ya que permitirá evitar que vuelvan a reproducirse crisis bancarias. En este sentido, manifestó que esta reforma servirá para "prevenir crisis futuras" y otorgará a España la legislación "más avanzada y completa" en este sentido. Preguntado por el retraso en la presentación del decreto ley -que desarrolla el Memorándum de Entendimiento (MoU) del rescate bancario y que estaba previsto aprobar en el último Consejo de Ministros- y por la posibilidad de que se derivara de discrepancias con las autoridades europeas, el titular de Economía aseguró que "no hay ningún tipo de discrepancia" y que el Ministerio, el Banco de España y el Tesoro han trabajado "de forma estrecha y próxima" con la Comisión Europea (CE) y el Banco Central Europeo (BCE). "No hay ningún tipo de divergencia al respecto, sino colaboración estrecha y extremadamente positiva", zanjó.

sin noticias del rescate Durante su comparecencia ante la prensa, también insistió en que el Gobierno "no ha tomado ninguna decisión" sobre la petición del rescate y "está analizando las alternativas" existentes hasta que sepa qué medidas aplicará el BCE para calmar el mercado de deuda.

En cualquier caso, afirmó que "nadie está negociando ningún tipo de ajuste adicional" para conseguir que el BCE intervenga para reducir la prima de riesgo. De hecho, aseguró que "es muy importante tener en cuenta que España va a cumplir sus objetivos presupuestarios independientemente de la intervención" del BCE. "El compromiso del Gobierno de España con la consolidación fiscal es absoluto, es total" y eso es "lo que se tiene que tener en consideración por parte de los socios europeos", aseveró.

De Guindos, tras su comparecencia ante la prensa, se reunió con el portavoz del PP en el Congreso, Alfonso Alonso; el vicesecretario general de Organización, Carlos Floriano ; el vicesecretario general de Estudios y Programas del PP, Esteban González Pons; el portavoz económico en el Congreso, Vicente Martínez-Pujalte; y la presidenta de la Comisión de parlamentaria de Economía, Elvira Rodríguez, entre otros.