Helsinki. El ministro de Exteriores de Finlandia, Erkki Tuomioja, indicó ayer que su país debe estar preparado para una posible ruptura de la eurozona, afirmando incluso que el fin de la moneda común puede hacer que Europa “funcione mejor”. En una entrevista publicada ayer en el diario británico The Daily Telegraph, Tuomioja dice que “tenemos que hacer frente, de forma abierta, a la posibilidad de una ruptura del euro”. “No es algo que nadie esté pidiendo en Finlandia, y mucho menos su Gobierno, pero tenemos que estar preparados”, agregó el ministro, quien dijo además que el Ejecutivo finlandés “tiene algún tipo de plan operativo para cualquier eventualidad”. Horas después, otro ministro finlandés aseguraba que el país está “cien por cien comprometido con el euro”.

El Gobierno de coalición finlandés, que encabeza el conservador Jyrki Katainen, ya se ha mostrado reticente a la hora de prestar ayuda financiera a países como Grecia, Portugal y España porque considera injusto que Finlandia, que ha cumplido las reglas de estabilidad del euro, tenga que asistir a quienes no las respetaron. En este sentido el ministro de Exteriores considera en el diario británico que ayudar a países con problemas de solvencia no es una prioridad, ya que una ruptura de la eurozona “no significaría el final de la Unión Europea” e incluso “podría hacer que la UE funcionase mejor”, dijo levantando la polémica en las instancias comunitarias.

Bruselas no tardó en responder a la amenaza de Tuomioja para recordar a Finlandia “el firme compromiso de todos los líderes de que harán todo lo que sea necesario para preservar la integridad de la Eurozona”, dejando claro que el Ejecutivo comunitario no trabaja en planes de contingencia ante los rumores de una posible salida de Grecia del euro.

“Creemos que el euro es irreversible”, afirmó el portavoz del Ejecutivo comunitario, Olivier Bailly, al ser preguntado por las polémicas declaraciones del ministro finlandés, que ante la presión más tarde se vio obligado a matizar sus propias palabras.

El ministro de Exteriores austriaco, Michael Spindelegger, afirmó por su parte que “necesitamos la posibilidad de echar a alguien de la Unión Monetaria”, dijo el ministro en declaraciones al diario Kurier, alimentando las dudas entre los socios del euro. >DnA/agencias