MADRID. El diferencial entre el bono alemán a diez años y el español del mismo plazo se ensanchaba debido a la caída del rendimiento del bono germano, hasta el 1,397 %, desde el 1,4 %; la rentabilidad del bono español se situaba a esta hora en el 6,767 %.
En los últimos días, las compras de títulos a medio plazo en previsión de que el Estado solicite ayuda financiera al fondo de rescate europeo permitían a Estado reducir su riesgo país y aliviar las tensiones en el mercado de deuda.
Ello se producía después de que los inversores dieran una lectura positiva al hecho de que el presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, dejara la puerta abierta a nuevas intervenciones en el mercado de deuda soberana.
Para que esas ayudas se hicieran efectivas, explicó Draghi, sería necesaria la solicitud expresa por parte de los países, lo que ha puesto los ojos del mercado en España e Italia.
Las primas de riesgo de otros países de la zona del euro mostraban en mayor medida que la española la mayor distensión de la deuda soberana europea: la de Italia caía a 454 puntos básicos, la de Irlanda, a 469, la de Portugal, a 907, y la de Grecia, a 2.348.
Los seguros de impago de deuda ("credit default swap" o CDS), relativos a los bonos a diez años de España para cubrir la posibilidad de impago de 10 millones de dólares se reducían y se cambiaban a 490.140 dólares anuales, por debajo de los 492.320 dólares que marcaban la víspera a esta hora.
Los CDS de España son aún los sextos más caros del mundo, por detrás de Argentina, Venezuela, Ucrania, Portugal y Líbano.
Por lo que respecta a los futuros, los que adelantan el comportamiento de la deuda europea subían al 143,25 % desde el 143,20 % anterior, en tanto que los que predicen el futuro de la deuda estadounidense comenzaban la jornada en el 149,28 %.