MURCIA. En una entrevista concedida al diario 'La Opinión' recogida por Europa Press, el presidente del Gobierno murciano ha dejado claro, sin embargo, que las condiciones serán "durísimas".
"Que nadie piense que nos van a regalar el dinero", ha señalado Valcárcel, quien ha adelantado que "se pedirían entre 200 y 300 millones", aunque ha precisado que todavía no se ha fijado la cuantía exacta que solicitará la región murciana al fondo creado por el Gobierno para ayudar a las comunidades autónomas.
El presidente murciano ha asegurado que "en la práctica", todas las comunidades autónomas están intervenidas, ya que, ha explicado, el Estado "obliga" a tomar decisiones que en circunstancias normales no se adoptarían.
"Todas las comunidades autónomas podemos ser intervenidas, dado que si no cumples el déficit, el Estado te obliga a tomar medidas y eso es la intervención", ha afirmado.
"No van a llegar unos señores vestidos de negro con unos maletines, con gafas de sol, para echarnos de los despachos a pescozón limpio", incide el presidente murciano, quien preguntado sobre si dimitiría si se produjera la intervención, considera que entonces Zapatero y Rajoy "tendrían que haber dimitido varias veces".
En este sentido, precisa que como Comunidad "perteneces a un Estado que te exige que tomes medidas y como país, perteneces a una unión de estados que también te obliga a aplicarlas por el bien general".
Frente a esta situación, manifiesta su respeto por las manifestaciones contra los recortes que se están sucediendo, pero piensa que "se podían haber hecho antes".
En su opinión, "se manifiestan contra un Gobierno que toma decisiones y no lo hicieron contra otro Gobierno que negaba la crisis. Al final se ha instalado en la gente la idea de que la crisis la ha causado Rajoy". Pero matiza, al hilo, que lo que está claro es que la gente "está muy enfadada y está en todo su derecho", dado que "cuando trabajas más y cobras menos, te enfadas".
Cree que lo que está cabreando a la gente es el hecho de que el Gobierno "siempre dijo que no iba a tomar esas medidas y las ha tomado", pero sostiene que "a lo mejor teníamos que haber entendido que Zapatero no tomó algunas medidas, las que tomó tarde y mal, por exigencia de Bruselas y habérnoslo pensado dos veces antes de hacer la crítica fácil".
Precisamente sobre recortes habla de su salario, que lo lleva congelado "cinco años" y confiesa "haber sufrido varias reducciones, la última hace unos días". De ahí que resalta que ha perdido "mucho poder de adquisitivo".
Aplicado a los entes públicos, ha subrayado que "no se hace en una semana, dado que liquidar una empresa pública lleva su tiempo", tras lo que recuerda que "se ha reducido más de lo que dijo Beteta".
DUDAR SOBRE COMO REBAJAR EL DEFICIT
En clave económica, también menciona el déficit, que aunque Murcia lo tiene "alto", también es la cuarta CCAA "menos endeudada". No obstante, precisa que "si nos hubiéramos endeudado y tuviéramos déficit alto, sí que se nos podría acusar de despilfarro pero hasta el año pasado en la Región hemos hecho autovías, colegios y hospitales, ese es nuestro déficit".
Murcia parte con un déficit "alto", advierte el presidente murciano, tras cifrarlo en un 4,4 por ciento el pasado año, por lo que argumenta que "hay motivos para dudar sobre cómo vamos a rebajar del 4,4 al 1,5 por ciento".
Pese a esta situación, reitera que "se harán todos los esfuerzos posibles para cerrar al 1,5 por ciento". "Hacienda está analizando las medidas del Plan de Reequilibrio, que hay que aplicar al máximo posible, aunque hay cosas que escapan a nuestra decisión como la venta de edificios", dice.
Y es que, puntualiza, "si no hay gente interesada en comprarlos no podemos hacer nada, aunque no es el caso, porque hay bastantes instituciones interesadas en adquirir el patrimonio de la Comunidad que ponemos en venta".
Pero, apunta, "en lo que no tengo que depender de nadie, digo aquí con toda la contundencia del mundo que vamos a cumplir con el objetivo del 1,5 por ciento", porque, alerta, si no "no tenemos futuro".
En materia de recesión económica, supone que en la UE son conscientes del sufrimiento al que se está sometiendo a España, pero recuerda que Alemania "lo pasó muy mal y aplicó duras medidas de austeridad y ahora dicen, oiga, si yo hice el esfuerzo y tuve manifestaciones en la calle, con el desgaste políticos y personal que supone, otros también pueden".
Lo que no puede ser, critica, "es que hayamos convertido la austeridad en la panacea", porque, explica, "hay que combinar las políticas de contención del déficit con las productivas y la política social debe estar por encima de las inversiones".
"Lo dice un presidente de Comunidad Autónoma que recibe críticas de los empresarios de la Región por reducir la inversión. Pero es lo que hay. No tenemos ingresos", reconoce.