Vitoria. Ni a la patronal alavesa SEA le ha gustado el plan de ajuste impuesto por el Gobierno central para reducir el déficit y cumplir con las exigencias de Bruselas. Sorprendentemente, el desapego por el contenido de este paquete de medidas vino de la mano de su presidente, Pascal Gómez, que reconoció un escenario económico más endurecido tras el hachazo del PP y lamentó la falta de medidas de "estímulo" del Gobierno central para recuperar el pulso del crecimiento. "Echamos en falta actuaciones de estímulo y reactivación económica que permitan garantizar el futuro vía generación de actividad, consumo y recaudación tributaria", expresó Gómez durante una jornada empresarial en la que se presentó a las compañías alavesas los Planes Extraordinarios de Financiación del Gobierno Vasco.
Trasladado este inusual discurso a los presentes -no es precisamente el presidente de SEA muy dado al fomento de la crítica institucional-, Gómez celebró a continuación la puesta en marcha de los planes del Gobierno al entender que podrían "incentivar" y "dinamizar" la actividad del tejido empresarial alavés en un momento, dijo, de "máxima necesidad". En este punto llamó una vez más la atención del sistema financiero privado, al que instó a mostrarse permeable y colaborador hasta donde ponga los límites el aval público.
Gómez, que estuvo acompañado por el consejero de Industria, Bernabé Unda, y los directores de Finanzas y Desarrollo Industrial del Gobierno, Miguel Bengoetxea, y Juan Garayar, respectivamente, subrayó la necesidad de poner en juego dos grandes propuestas demandadas por el empresariado vasco: el plan de Reactivación de la Economía Vasca 2012-2014 y la Propuesta Empresarial para reformar el Impuesto de Sociedades en la CAV. "Tenemos que hacer del Órgano de Coordinación Tributaria un laberinto de innovación fiscal que estudie todas las posibilidades que da el Concierto Económico", concluyó.
