MADRID. Las fuentes explican que el producto base de energía subastado para el tercer trimestre arrojó un precio un 10,3% superior al del segundo trimestre, si bien los ajustes de estacionalidad y de apuntamiento posteriores situaron el incremento en el 9,3%.

El resultado de esta subasta, en la que las comercializadoras encargadas de suministrar la tarifa regulada adquieren la energía correspondiente al tercer trimestre, tiene un peso cercano al 50% sobre la TUR. En este caso, su traslado al recibo de la luz supone una presión al alza del 3,9%.

La anterior subasta eléctrica, celebrada en marzo, se cerró con bajadas del 7%, si bien la TUR subió finalmente un 7% para recoger un incremento de peajes cercano al 23% con el que el Gobierno cumplía las sentencias del Tribunal Supremo y garantizaba el equilibrio entre costes e ingresos. La subida vino acompañada de un recorte de costes regulados de 1.700 millones.

En la subasta de este martes, las cinco eléctricas que prestan el servicio de tarifa regulada, que son Endesa, Iberdrola, Gas Natural Fenosa, HC y E.ON, han adquirido 5.036 megavatios (MW) de carga base y a 575 MW de carga punta correspondientes al tercer trimestre del año.

Tras conocerse el precio de la energía, el 50% restante de la TUR corresponde a los peajes eléctricos, en los que se recogen los costes regulados del sistema eléctrico y cuya cuantía está revisando el Gobierno como parte de la reforma energética para acabar con el déficit de tarifa.

Endesa ha explicado en su junta de accionistas celebrada este martes que la reforma energética podría aprobarse previsiblemente en julio y que su importe podría asemejarse al recorte ya aplicado por el Gobierno en marzo al sistema eléctrico, de 1.700 millones de euros.

Al margen de las decisiones que adopte el Gobierno relacionadas con la reducción de costes del sistema eléctrico, los expertos advierten de que será necesario elevar los ingresos del sistema y de que, para ello, no solo deberán subir las tarifas, sino también previsiblemente la fiscalidad.