madrid. La macroeconomía volverá esta semana a centrar todas las miradas. Antes del jueves, la consultora alemana Roland Berger y la estadounidense Oliver Wyman darán a conocer las necesidades de capital de la banca española. Es un día marcado en rojo. Además, España volverá a medir la confianza internacional en sus finanzas con la emisión de letras en dos subastas. Serán las primeras tras el anuncio del rescate a la banca y se celebrarán en un momento de alta tensión, cuando el bono español ha superado de forma puntual la temida barrera del 7% y la prima de riesgo el umbral de los 550 puntos básicos. Por si fuera poco, el resultado de las elecciones de Grecia y las posibles turbulencias que podría acarrear a la eurozona, también serán tenidas en cuenta.
Además, la cumbre del G20 marcará la agenda política internacional esta semana, con especial atención a la crisis europea, mientras que en España el miércoles se celebrará una sesión de control al Gobierno en el Congreso.
Se antoja una semana complicada, con la actualidad económica de nuevo en boca de todos, día sí y día también. Las dudas sobre las elecciones en Grecia ya han ocasionado grandes tensiones en la zona euro en las últimas semanas y está por ver como digieren esos mercados los resultados de ayer. En la última semana, esos nervios no se han frenado y, pese al anuncio del plan de rescate europeo a la banca española, el Estado se ha visto en el punto de mira. Y es que son muchas las dudas que aún persisten sobre esa "línea de crédito", de hasta 100.000 millones. Como consecuencia, la prima de riesgo marcó su máximo en la era euro y el bono español alcanzó el 7%. Además, Moody's rebajaba el martes tres escalones la deuda soberana española, hasta dejarla a un paso del "bono basura", y argumentaba el castigo por considerar que el acuerdo del rescate "aumentará" la carga de la deuda, limitará el acceso de España a los mercados financieros y acrecentará la "debilidad" de la economía.
No es, por tanto, el mejor momento para medir la fortaleza del Estado en los mercados de deuda, pero España lo tiene programado. El martes, el Tesoro Público emitirá letras a doce y dieciocho meses, y el jueves, bonos a dos, tres y cinco años, con vencimiento en 2014, 2015 y 2017, respectivamente, aunque aún se desconoce el importe de las dos pujas, que se hará público hoy.
Europa está en el epicentro de una tormenta económica que parece no tener fin. El presidente del Banco Mundial, Robert Zoellick, reclama ya reformas rápidas en la eurozona para hacer frente a la crisis de la deuda y critica, en una entrevista que publica hoy mismo la revista alemana Der Spiegel, a los políticos europeos, según adelantaron ayer las agencias. "Los políticos europeos siempre reaccionan un día demasiado tarde y prometen siempre un euro menos de lo que hace falta", afirma Zoellick.
La banca, a la espera Pero si un día se antoja clave, ese será cuando se den a conocer las necesidades reales de la banca española, para resolver hasta dónde se puede elevar el rescate a España, fijado con un tope de hasta 100.000 millones de euros. El Gobierno publicará esta semana las necesidades de capital de la banca según la valoración independiente sobre los balances del sector que han realizado las consultoras Roland Berger y Oliver Wyman. Oficialmente está previsto que los datos se den a conocer antes del próximo jueves, día 21, aunque se da por hecho que el Gobierno adelantará su publicación, según expertos analistas. La reunión del G20, que se celebra entre hoy y mañana en México, podría ser la excusa para conocer esos datos.
Según se ha filtrado en las últimas semanas, los mercados valoran que el sector financiero español podría necesitar entre 60.000 y 70.000 millones de euros para superar las pruebas de estrés elaboradas por Roland Berger y Oliver Wyman, que durante un mes han analizado los balances bancarios del estado, con numerosos auditores examinando las cuentas de todas las entidades. Esa cantidad está por encima de los 40.000 millones que el Fondo Monetario Internacional calculó que necesitaría la banca española.
Mariano Rajoy no llegará a Madrid hasta el viernes, día en el que viajará a Roma. Foto: efe