BRUSELAS. El portavoz económico de la CE, Amadeu Altafaj, subrayó que no se debe dar "el privilegio a una agencia de calificación de determinar si una decisión como la tomada por el Eurogrupo el sábado (en referencia al apoyo a España) es un éxito o un fracaso".
Altafaj recordó que las autoridades españolas y sus socios europeos "están afrontando esta crisis con determinación en todos los frentes" y subrayó que en la presión de los mercados influyen factores externos como Grecia y el hecho de que el proceso de recuperación de la confianza siempre lleva un tiempo.
Preguntado en una rueda de prensa por los niveles récord alcanzados hoy por el interés del bono español a diez años, el portavoz insistió en que los temores no responden únicamente a la situación particular de España, sino que reflejan también otros hechos.
"Está claro que acontecimientos recientes en los mercados financieros y también de otra naturaleza en Europa, y en la eurozona en particular, tienen un impacto. Todos estamos en el mismo barco", señaló.
Altafaj apuntó en concreto a Grecia -que este domingo celebra unas cruciales elecciones- y recordó que en estos momentos los participantes de los mercados se mueven principalmente basados en una "gran aversión al riesgo".
"La mejor forma de combatir estas reacciones es siendo predecible y aplicando las decisiones tomadas. Este es el caso hoy en España", ha asegurado.
Según Altafaj, el gobierno de Madrid está actuando de forma determinada tanto en términos de "consolidación fiscal", como en la introducción de reformas estructurales para impulsar el crecimiento y el empleo, así como en el frente financiero.
En este último, el portavoz comunitario insistió en la importancia del apoyo comunitario para la recapitalización de la banca española a través de un préstamo de hasta 100.000 millones de euros.
"Todas estas respuestas son las que deben permitir a España reforzar la confianza de todos los participantes del mercado, incluidas al final las agencias de calificación", opinó Altafaj, que no quiso entrar a valorar en detalle la decisión de Moody's de rebajar en tres escalones la nota que otorga a la deuda soberana de España.
Hoy, el interés del bono español a diez años en el mercado secundario de deuda rozó el 7 % por primera vez desde la creación del euro y la prima de riesgo -que mide el diferencial con el bono alemán- alcanzó a media mañana los 546 puntos.