madrid. Transparencia Internacional (TI) advirtió ayer de que España no sanciona ni controla "suficientemente" la ineficiencia, el despilfarro y las corruptelas en el sector público. Además, recomienda la aprobación de un plan nacional de lucha contra la corrupción y de un código ético del diputado que actualice la normativa de incompatibilidades y conflictos de interés.

La ONG aborda el problema de la corrupción y la importancia de sacar adelante una Ley de Acceso a la Información frente a la "cultura de opacidad" y realiza varias recomendaciones a lo largo del informe.

La organización, con sede en Berlín, propone al Gobierno que promueva un plan estratégico contra la corrupción que involucre a partidos políticos, ONG, sindicatos, asociaciones empresariales y medios de comunicación. Considera necesario reformar la Ley de Enjuiciamiento Criminal y plantea que la investigación de los delitos de corrupción por parte de los fiscales podría hacer "más viable" el sistema, según refleja en el informe que lleva por título Dinero, política, poder: Riesgos de corrupción en Europa.

En otro de los capítulos, alaba la independencia e imparcialidad de la Administración central, aunque critica el "clientelismo y el patronazgo" de las entidades locales. "La ineficiencia, ineficacia, despilfarro y corruptelas no están suficientemente controladas, ni sancionadas. Es muy destacable la ausencia de preocupación por la educación de la ciudadanía frente al problema de la corrupción", argumenta.

Extiende los "graves déficits" en la rendición de cuentas del sector público a Grecia, Portugal o Italia. "Los vínculos entre la corrupción y la actual crisis financiera y fiscal en estos países ya no se pueden ignorar. En ellos la corrupción consiste a menudo en prácticas legales pero no éticas que son el resultado de unas normas opacas en lo relativo a los grupos de presión o el tráfico de influencias", precisa.