MADRID. De esta forma, los precios vuelven a bajar en el quinto mes del año, tras haber subido en abril dos décimas, hasta el 2,1%, a causa del encarecimiento de la luz y el tabaco.
La tasa anual lograda en mayo es la misma que se registró el pasado mes de marzo y sitúa al IPC español en niveles de agosto de 2010.
Según el organismo estadístico, el descenso de la tasa anual del IPC en mayo fue consecuencia, principalmente, de la bajada de los precios de los carburantes y de los alimentos y bebidas no alcohólicas.
Por su parte, el Indice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA) alcanzó en mayo el 1,9%, una décima por debajo de la tasa de abril.
El INE inició a principios del año pasado la difusión del indicador adelantado del IPC tras introducir una serie de cambios en el IPC armonizado, que han hecho que las diferencias entre ambos, antes mínimas, se acentúen.
El organismo estadístico ha recordado que los indicadores adelantados sólo proporcionan información orientativa, de tal forma que no tienen por qué coincidir con los datos definitivos, que se publicarán el próximo 13 de junio.
Ese día se conocerá también la evolución de la tasa mensual del IPC después de que en abril se disparara un 1,4%, su mayor repunte en cinco años, por efecto, entre otras cosas, del encarecimiento de las gasolinas, del vestido y el calzado, de la luz y del tabaco.