unos 4.500 mossos d'Esquadra y 3.500 agentes más, entre guardia civiles y policías nacionales, blindan desde ayer Barcelona para garantizar la seguridad durante la reunión del Banco Central Europeo (BCE) que se celebrará hasta el viernes en la Ciudad Condal. Este macrodispositivo tratará de afrontar posibles movilizaciones de colectivos radicales que puedan llegar también de otros puntos de Europa, ante la presencia en la capital catalana del máximo órgano rector del BCE.

El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, subrayó hace unos días la importancia de que Barcelona, Cataluña y España transmitan una imagen "de seguridad y convivencia pacífica" al mundo durante esta cita.

coordinación Habrá dos centros de coordinación de este macrodispositivo: uno estatal en la Delegación de Gobierno que encabezará el secretario de Estado de Seguridad, Ignacio Ulloa, y otro en la Conselleria de Interior dirigido por el conseller, Felip Puig.

La Policía Nacional y la Guardia Civil, además de prestar vigilancia en el entorno del Hotel Arts y en el Forum de Barcelona --donde se producirán los encuentros--, se harán cargo de sus proximidades y de su subsuelo, y su presencia también será visible en las calles.

La policía autonómica catalana se encargará básicamente de garantizar la seguridad en la ciudad, aunque de momento ninguna entidad ha anunciado concentraciones contra el BCE, más allá de las caceroladas diarias convocadas desde los propios domicilios por el movimiento 15M para los tres días que durará la reunión.

La única cita reivindicativa destacable esta convocada para mañana y es la manifestación universitaria en contra de la subida de las tasas y que coincide en el tiempo con la cita del BCE.

Según explicaron fuentes de Interior, dentro del operativo de los Mossos d'Esquadra se han instalado a lo largo de la ciudad varias cámaras de videovigilancia móviles que retirarán una vez finalicen las reuniones. Además, protegen algunos puntos clave de la ciudad en los que sospechan que pueden producirse incidentes, entre ellos las sedes de los principales partidos.

También la Guardia Civil ha duplicado sus efectivos en el Aeropuerto de Barcelona para garantizar la seguridad de las instalaciones, las aeronaves y los pasajeros durante la reunión, dedicando especial atención a los vuelos procedentes de países europeos y de otras comunidades autónomas. Hasta ayer en El Prat no se había producido ningún incidente destacado ni ninguna detención en estos días previos a la reunión del BCE.

fronteras También con motivo de la reunión, se ha suspendido el acuerdo de Schengen, y la Policía Nacional ha reforzado la vigilancia en la frontera con Francia, deteniendo hasta el mediodía de ayer a 17 personas y denegado la entrada a España a otras 43 en los primeros días de aplicación desde que comenzó, el 28 de abril.

Según informaba ayer el citado cuerpo policial, unos 1.300 agentes han controlado a más de 240.000 personas desde que el sábado se levantó el tratado en los pasos fronterizos de La Jonquera, Portbou, Puigcerdà, Camprodon, Les y Canfranc, así como en las fronteras aéreas de los aeropuertos de Barcelona y Girona.