vitoria. "La presidenta del país convocó por sorpresa una rueda de prensa a medio día sin concretar de qué iba a tratar. Cuando nos enteramos en la empresa, empezaron a correr los rumores muy rápido. Se decía que iba a hablar sobre el tema de YPF. Para sorpresa de todos, la señora Cristina Fernández de Kirchner anunció la expropiación del 50,01% que corresponde a la parte española. Los pasos siguientes fueron tristes y hostiles". Así relata el navarro Fernando Díez Sacramento, de 35 años, cómo vivió la nacionalización de YPF desde su puesto de trabajo en la filial de Repsol en Buenos Aires al mismo tiempo que la presidenta anunciaba la noticia desde la Casa Rosada.
Este licenciado en Administración y Dirección de Empresas por la Universidad de Lincoln, en Inglaterra, trabaja desde diciembre de 2010 en el área de compras de la compañía, después de que ejerciera un puesto semejante durante tres años en la multinacional IBM en el país argentino. Natural de la localidad navarra de San Adrián, se trasladó a Buenos Aires hace seis años para estudiar un postgrado de Máster en Dirección de Empresas, en la Universidad de Palermo, que concluyó en el año 2007.
¿Cómo vivió el anuncio de expropiación de YPF?
El anuncio ha sido una sorpresa para mí. Cuando nos enteramos de que la presidenta argentina había convocado una rueda de prensa por sorpresa, se produjo un revuelo en la empresa, y empezaron a correr los rumores de que iba a tratar el tema de YPF. Para sorpresa de todos, anunció la expropiación del 50,01%, un porcentaje que solo corresponde a la parte española. Tras el anuncio, los pasos siguientes fueron tristes y hostiles.
¿Por qué dice que fueron tristes y hostiles?
Llegaron miembros del Gobierno, con seguridad, y dieron a los directores (tanto españoles como del socio local, Grupo Petersen) 15 minutos para abandonar las instalaciones de la empresa.
¿En qué situación se ha quedado la empresa?
En estos momentos nos encontramos en un proceso de intervención de la compañía durante un mes.
¿Cuál es el futuro inmediato que le espera?
En YPF estoy trabajando en el área de compras y mi puesto es comprador de tecnología como el que tenía en la multinacional IBM. YPF gasta en tecnología unos 200 millones de euros. Sinceramente, hay incertidumbre sobre quién y cómo se va a gestionar la empresa. En mi área de compras, no se va a aprobar ningún pedido hasta que no se aclare cuál va a ser la estrategia de los nuevos gestores y eso puede suponer un mes como mínimo trabajando a medio gas.
¿Le ha sorprendido la expropiación o por el contrario esperaba esta actuación del Gobierno?
Desde hace tres meses se escuchaban rumores sobre una posible entrada del Estado argentino en el accionariado de la empresa, pero nadie se imaginaba que iba a ser de esta manera tan hostil. Hay que tener en cuenta que solo han nacionalizado la parte española.
¿En los tres últimos meses, el Gobierno ha actuado de alguna manera que hiciera prever lo que ha sucedido?
Durante estos tres últimos meses, el Gobierno argentino ha venido cancelando concesiones de pozos petrolíferos a la filial de Repsol con el argumento de falta de inversión, aunque detrás escondía bajar el precio de las acciones para poder comprar más barata la compañía petrolera.
¿Cómo ha reaccionado el pueblo argentino a la acción de Cristina Fernández de Kirchner?
Aquí, en Argentina, encuentras a mucha gente que está a favor de la expropiación y nacionalización de la empresa. Y es que para ellos, la YPF estatal representa aquel pasado en el que Argentina "era una gran nación".
¿Cuándo surgió la oportunidad de trabajar en la filial de Repsol?
Decidí venir hace seis años a Buenos Aires a estudiar un MBA en la Universidad de Palermo, que concluí en 2007. Una vez que terminé este postgrado, me salió trabajo como comprador regional de tecnología en la multinacional IBM, que tiene la sede regional en Argentina. En esta compañía estuve trabajando durante tres años y medio. Después, ya a finales de 2010, me salió una oferta de empleo en YPF, la filial de Repsol, y decidí cambiar de compañía.
¿Por qué?
Acepté el nuevo trabajo porque vi la posibilidad de volver a España a través de Repsol. Antes de mi trayectoria en Argentina, en Navarra estuve en la empresa Láser Ebro, también en el área de compras durante cuatro años, desde 2002 a 2006; y antes, de gestor comercial en Caja Rural de Navarra, entre 2000 y 2002.