En su intervención en el Foro Económico Mundial, que se celebra en la localidad suiza de Davos, Draghi ha dicho que si se compara la situación actual con la de hace cinco meses, la zona del euro es "otro mundo".
"El nivel de progreso es excelente. Si miramos el progreso que han hecho los países de la zona del euro en la retención fiscal y en la introducción de reformas estructurales es increíble", según Draghi.
El presidente del BCE considera que una unión fiscal no se puede basar en una unión de transferencias en las que unos países pagan para que otros gasten como quieran. "Una unión fiscal comienza con normas que aseguren que los países pueden quedarse", ha declarado Draghi.
En este sentido, el presidente del BCE expresó su confianza en que la próxima cumbre europea del 30 de enero logre avances en la intensificación de la unión fiscal.
El presidente calificó los programas de rescate de "algo que se puede usar para evitar que ocurran accidentes cuando se produce un cambio traumático en los diferenciales", en la apreciación de riesgo.
Draghi consideró que el BCE ha evitado una crisis del crédito con la inyección de liquidez a tres años que acometió a finales de diciembre del pasado año.
Asimismo el presidente del BCE consideró necesario que se produzca una reactivación del mercado interbancario y que los bancos vuelvan a prestarse entre ellos en vez de acudir a la entidad monetaria.