Vitoria. Un total de 35 sucursales de banca minorista y tres oficinas de empresas pertenecientes a las cajas vascas -ahora reconvertidas en Kutxabank- cerrarán sus puertas antes del 31 de marzo, según fuentes sindicales. Son oficinas que se encuentran en los territorios de expansión de las entidades (fuera de la CAV) y que se encuentran, fruto de la crisis, en una complicada situación, aportando poco negocio al nuevo banco de las cajas. En cualquier caso, el cierre se producirá sin que se produzcan despidos, ya que el banco planteará a los trabajadores otro tipo de medidas "no traumáticas".
Según fuentes de Comisiones Obreras, "no habrá ni un solo despido" y es que en el contrato laboral que varios sindicatos firmaron con las tres cajas antes de la aprobación de la fusión se estipula que será así. El miércoles, Mario Fernández, presidente de la entidad, ya adelantó a los medios que habría cierre de oficinas, pero que esa decisión no supondría medidas traumáticas para los empleados. Y es que la entidad ha programado un programa de prejubilaciones y otro de bajas voluntarias incentivadas. Además, a las personas afectadas se les propondrá otro puesto de trabajo, lo que supondrá su traslado. ELA cuantificó ese traslado geográfico en 120 trabajadores ayer.
En esas 38 oficinas trabajan actualmente 212 personas, pero ese cierre anunciado no afectará a la totalidad de los empleados, sino a aproximadamente la mitad, según ha conocido este periódico, ya que el resto serán colocados en oficinas cercanas. Es muy probable, según fuentes sindicales, que sean pocas las personas que se sumen a las bajas incentivadas en las próximas semanas. En el caso de las prejubilaciones, las mismas fuentes indicaron que, debido a la edad requerida, es factible que estas se den principalmente en la CAV, dónde hay empleados que cumplen los requisitos. Así, muchos de los trabajadores afectados de esas 38 oficinas serán trasladados, principalmente, a oficinas de la CAV, según los propios sindicatos. Ese traslado además, contará con las garantías del convenio de empresa del banco, "con las mejores compensaciones del sector para este tipo de casos", según las mismas fuentes. Así, los empleados que se vean afectados tendrán un plus anual por el traslado durante cuatro años y ayudas para la vivienda durante el mismo periodo de tiempo.
Repartidas Según fuentes del banco, se procederá al cierre de esas 35 oficinas de banca minorista, de las cuales siete llevan la marca de BBK, una la de Vital y 27 la de Kutxa -seis de ellas en Catalunya; tres entre la Comunidad Valenciana y Murcia; cinco en Madrid; once en Andalucía; y otras diez más repartidas entre: Navarra, La Rioja, Asturias, Burgos, Aragón y Cantabria-. Además, las tres sucursales de empresas que van a ser clausuradas están en Vigo, Sevilla y Granollers (Barcelona). Según el sindicato LAB, está previsto que el cierre se realice antes del 31 de marzo y los empleados afectados "conocerán su destino dentro de un mes".
Según conoció ayer DNA esta reducción de la red de sucursales responde a la tendencia de cierre de oficinas que se está produciendo en el sector financiero. "Se abrieron oficinas en los últimos años del 'boom' inmobiliario y, según ha caído el mercado inmobiliario, muchas de esas oficinas ni son rentables ni tienen negocio. Son cierres que están a la orden del día del sector financiero", explicaron desde el banco recién creado.
En el caso de las oficinas con el logo de Kutxa que cerrarán sus puertas, que son 27 de un total de 35, la explicación a ese alto número está, según Kutxabank, en que BBK empezó en 2009 a reducir el número de oficinas en la zona de expansión fruto de la crisis y la menor demanda. La caja guipuzcoana no abordó una reducción tan grande y por ello, ahora, son mayoría las sucursales de Kutxa que se van a cerrar en pocas semanas. En cuanto a la recién constituida mesa de negociación del convenio, LAB y ELA criticaron ayer que la empresa, CCOO, ALE, Pixkanaka y GIV hayan "ignorado" su petición y la del sindicato Aspem de promover un convenio a nivel de Hego Euskal Herria, ya que "han acordado constituir mesa de negociación de convenio a nivel estatal", algo que va, a su juicio, "contra la voluntad de los trabajadores".