bilbao. El Juzgado número 2 de Mercantil de Bilbao ha acordado, tras la audiencia previa celebrada por la demanda de impugnación de ACS contra varios acuerdos de la última junta de accionistas de Iberdrola, que no habrá juicio, al no haber admitido la prueba pericial presentada por la eléctrica y establecer que el único objetivo del proceso es determinar si esos acuerdos vulneran o no la ley y no otra serie de hechos planteado por la empresa de Ignacio Sánchez Galán. El magistrado Aner Uriarte dictará sentencia una vez que reciba las conclusiones de las dos empresas.
Esta decisión ha sido adoptada en la audiencia previa celebrada ayer, en la que ha supuesto una nueva cita ante los tribunales de las dos empresas que mantienen una pugna judicial para determinar si el grupo de construcción y servicios puede entrar en el consejo de la eléctrica, de la que es primer accionista (19%). En este caso, el motivo era la impugnación que ACS presentó contra algunos de los acuerdos sociales de la última Junta de Iberdrola, celebrada en mayo, al considerar que no se ajustan a la Ley de Sociedades del Capital.
En la vistilla, ACS defendió que la discusión era estrictamente "jurídica" y que había, por parte de Iberdrola, un "mal entendimiento" sobre la cuestión objeto de debate, que, a su juicio, se limita a que si los citados acuerdos impugnados se ajustan o no a derecho. La defensa de Iberdrola pedía al juez que se pronunciara sobre la conclusión de que ACS, a su juicio, enmarca la aprobación de esos acuerdos dentro de una "actitud de hostigamiento" contra el grupo de Florentino Pérez.