madrid. El Banco Santander y CaixaBank manifestarán hoy formalmente al Banco de España su intención de participar en la subasta de la Caja del Mediterráneo (CAM), con lo que el proceso de adjudicación de la entidad gana atractivo y se dificultan las opciones para otras instituciones de menor tamaño.
Según informaron ayer fuentes financieras, sin conocer las ofertas de otros potenciales compradores, el Banco Santander y CaixaBank parten ya como favoritos simplemente por su posición de liquidez y su experiencia. "Las dos entidades tienen capacidad suficiente para asumir un gigante del tamaño de la CAM y son conscientes del atractivo de su red de sucursales y su número de clientes", destacaron las mismas fuentes.
Se espera que el Banco Santander plantee su intención de hacerse con la caja alicantina a través de Banesto, al que colocaría en una posición de claro liderazgo en la banca mediana.
Al igual que CaixaBank, el grupo presidido por Emilio Botín podría destacar su fuerte posición de liquidez para encarar los vencimientos de emisiones mayoristas de la CAM, superiores a 7.000 millones antes de 2013.
Los expertos consideran que las garantías de liquidez serán un factor determinante para que el Banco de España escoja a los potenciales compradores.
Además, tanto el Banco Santander como CaixaBank pueden aprovechar la "ventaja" de adquirir a "buen precio" una entidad con una importante cuota de mercado y una cartera inmobiliaria que tenderá a revalorizarse con el tiempo.
En cualquier caso, las ofertas del Banco Santander y CaixaBank no serán las únicas que el Banco de España tenga que valorar a partir de este martes, una vez cerrado el plazo de presentación.
Se da por hecho que el BBVA e Ibercaja también manifestarán su interés por la CAM, aunque quizá con propuestas menos atractivas a ojos del supervisor. El Banco de España podría recibir además ofertas no vinculantes de las cajas vascas (BBK, Kutxa y Caja Vital) y del Banco Sabadell, aunque en los últimos días se especulaba con que el interés por la operación de estas entidades había disminuido notablemente.
Todos estos bancos, más una docena de extranjeros, forman la veintena de interesados que en las últimas semanas estudiaron el cuaderno de venta facilitado por Bank of America-Merril Lynch.