vitoria. En vísperas de que se apruebe el tortuoso proceso de integración de las tres cajas vascas, la agencia internacional de medición de riesgos Fitch rebajó ayer un escalón la calificación de la deuda a largo plazo de Caja Vital, al pasarla de A- a BBB+, pese a lo cual su rating es "el cuarto mejor de un total de 16 cajas o grupos de cajas", según reveló por la tarde la entidad alavesa.
A juicio de ésta, la nueva calificación se produce en un contexto económico tan complejo como el actual, al tiempo que recordó que esta certifiación será sustituida por la que obtenga la entidad resultante de la integración de las cajas antes del 31 de diciembre.
Respecto a los motivos que han impulsado la rebaja, Caja Vital entiende que se hayan podido valorar "aspectos ajenos a la gestión de la propia entidad financiera", los cuales han incidido en la calificación a largo plazo, entre ellos el cómputo del "riesgo país".
Por otro lado, asegura la Vital que el informe de Fitch -una de las tres grandes agencias junto a Moody's y Standar & Poor's- refleja que la situación de la cartera crediticia de la caja alavesa "es mejor que la media de las entidades del sector" y que "su fuerte solvencia y capitalización le permitirían absorber incluso un deterioro de la situación económica todavía mayor".
Por último, la entidad que preside Carlos Zapatero declaró que dispone en estos momentos de una liquidez superior a los 400 millones de euros además de otros activos realizables por importe superior a mil millones de euros. Estos avales, sostuvo la entidad alavesa, permitiría hacer frente con holgura a las restricciones actuales del mercado de capitales.