El Gobierno español quiere flexibilizar aún más la jornada a tiempo parcial

adrián legasa

bilbao. El Gobierno español ha depositado todas sus esperanzas en el contrato a tiempo parcial para tratar de reducir la elevada tasa de paro de cara a las elecciones anticipadas del 20 de noviembre. A las bonificaciones de las cotizaciones aprobadas en febrero para fomentar este tipo de contratación se unirá una nueva ley para introducir más flexibilidad en el horario de los empleados que no trabajan a jornada completa, pudiendo los empresarios disponer de hasta un 10% de las horas de cada trabajador para distribuirlas según sus necesidades, tal y como explicó ayer el ministro de Trabajo, Valeriano Gómez.

En una entrevista a Europa Press, el ministro anunció que aumentar la flexibilidad a tiempo parcial es uno de los objetivos del Ejecutivo ante el mal momento que atraviesa la contratación a tiempo completo, por lo que el asunto ya ha salido a debate en la mesa de empleo que forman sindicatos y patronal. La propuesta del Gobierno contempla, según avanzó Gómez, la posibilidad de que los empresarios dispongan de "en torno a un 10% de la jornada de trabajo" de los empleados a tiempo parcial para distribuirla de forma irregular según las necesidades de la compañía, aunque deberán avisar al trabajador afectado con varios días de antelación.

La medida, que se adapta a los intereses de los empresarios, no está enfrentada con los derechos de los trabajadores, según argumentó el ministro. En este sentido, Gómez explicó que los planes del Ejecutivo contemplan mejorar el reconocimiento de la jornada laboral a tiempo parcial en la pensión. "La idea es que un trabajador que esté 35 o 40 años a tiempo parcial tenga el mismo periodo devengado de años de cotización que un trabajador a tiempo completo", aseguró Gómez, quien, no obstante, recordó que la cuantía de la pensión "será menor porque su salario también lo es".

Los plazos que maneja el Gobierno para la aprobación de esta reforma contemplan una posible aprobación en el Consejo de Ministros del 19 de agosto, previo acuerdo por parte de sindicatos y CEOE, o bien en el primero de septiembre. Por ello, Valeriano Gómez apremió ayer a los agentes a llegar pronto a un acuerdo que permita a las Cortes legislar con consenso social antes de su disolución a finales de septiembre. "Si no hay acuerdo, legislaremos", aseveró el ministro.

La intención del Gobierno es que esta medida para dotar de mayor flexibilidad al contrato parcial se aplique durante "un periodo transitorio de dos o tres años", y, si el resultado es positivo, "convertirla en estable", dijo Gómez.

el paro, hasta el 21% La reforma se convierte en uno de los últimos cartuchos que quedan al PSOE antes de los comicios de noviembre para atajar la alarmante tasa de desempleo del Estado, que ha alcanzado ya el 21%, según Eurostat, tras crecer otras dos décimas en junio. La media española es la más alta de la Unión Europea -9,4%- y supera en casi cinco puntos a la del segundo país en el escalafón, Lituania, con una tasa de paro del 16,3%. Tras el repunte de junio, el desempleo afecta en España al 45,7% de los menores de 25 años, más del doble que en Europa, donde la tasa de paro juvenil se sitúa en el 20,5%.

El ministro de Trabajo, Valeriano Gómez, en un Pleno junto al titular de Industria, Miguel Sebastián. Foto: efe