madrid. La Comisión de Justicia del Congreso aprobó, con el apoyo de todos los grupos políticos salvo del PP, el proyecto de Ley de Reforma Consursal, que agilizará y abaratará los procedimientos concursales y ayudará a solucionar negociadamente la insolvencia de familias.
El ponente socialista, Jesús Quijano, subrayó que la reforma es "oportuna y necesaria" y que no altera el modelo concursal vigente, y destacó algunos de los aspectos que contiene, como son la composición más reducida y especializada de la administración concursal y la posibilidad de homologación judicial de los acuerdos de refinanciación entre el deudor consursado y las entidades financieras, entre otras. Asimismo, resaltó que la ley ayuda a las empresas en cuanto a los acuerdos de refinanciación pues profundiza en "alternativas" al concurso o los institutos preconcursales y se detiene en las cuestiones sociales ampliando la protección de los trabajadores. Se trata, en definitiva, de "una reforma que debe contribuir a abordar y resolver con más eficacia las situaciones de crisis", señáló el ponente socialista. La nueva disposición adicional trata de contentar a grupos como CiU o ERC-IU-ICV, que exigían que la reforma de la Ley Concursal incluyera medidas para resolver los problemas de deudas familiares.