Vitoria. El Gobierno Vasco aprobó ayer el anteproyecto de Ley de Cajas de Ahorros que propone cambiar la composición actual de las asambleas de las entidades y permitir la entrada de representantes nombrados por el Parlamento Vasco, las Juntas Generales o las cámaras de comercio. El objetivo del texto legal es "profesionalizar" los órganos de gobierno de las cajas e impedir la presencia en los mismos de cargos políticos electos, así como de altos cargos de cualquier administración, un cambio sustancial que se produce en el momento en que Kutxa, BBK y Vital ya han iniciado el proceso para integrarse bajo la forma de Sistema Institucional de Protección (SIP).
El texto al que el Consejo ha dado luz verde tendrá que superar primero el trámite parlamentario antes de entrar en vigor. El consejero de Economía, Carlos Aguirre, mostró ayer su confianza en que la norma sea aprobada antes del 1 de enero de 2012, fecha prevista para que eche a andar Kutxa Bank. Preguntado por el rechazo que el proyecto de ley suscita en el PNV, Aguirre aseguró que la negociación "no está cerrada", por lo que consideró que las posturas podrían acercarse "algo".
El proyecto impide blindar el consejo de administración de Kutxa Bank para vetar la entrada de Bildu, una decisión contraria a la deseada por las tres cajas, que obligará a modificar el consejo de administración del nuevo banco para adaptarlo a las nuevas asambleas en cuanto éstas se constituyan, esto es, unos meses después de que Kutxa Bank inicie su aventura. En este escenario, Bildu accederá al consejo a través de la Kutxa y el PP, por medio de la Vital. Todo ello, no obstante, si el trámite parlamentario no se modifica. "Yo no descarto absolutamente nada a estas alturas", sugirió el consejero Aguirre.
Respecto a este asunto del blindaje a los órganos de gobierno del nuevo banco, el titular de Economía recordó que cuando entre en vigor la norma tendrá que haber una renovación íntegra de los órganos de las cajas y a partir de ahí se verá cómo incide eso en Kutxa Bank. "Habrá que mirar muy bien cómo se hace eso y todo está abierto", insistió.
Ortuzar habla de "pucherazo" La iniciativa presentada ayer supone cambios en la composición actual de las asambleas generales de las entidades y plantea aumentar el peso de los impositores al permitirles elegir al 47% de los 100 miembros que componen las asambleas generales (actualmente pueden elegir al 43%). Asimismo, reduce el peso de las corporaciones municipales que cuentan con oficinas de la entidad (del 30% al 17%). En cambio, mantiene en el 7% la representación de los empleados de las cajas y como novedad, abre las asambleas de las entidades al Parlamento Vasco (5%), a las juntas generales (6%), a las cámaras de comercio (1%), así como a sindicatos y patronales presentes en el CES, y a la Federación de Asociaciones de Consumidores, con el mismo porcentaje.
La consecuencia de estos cambios es que se reduce al 40% la representación de las administraciones públicas en las asambleas generales de las cajas. Actualmente, el 50% de los miembros de las entidades son nombrados por impositores y trabajadores y el otro 50% por las administraciones.
Por otro lado, el presidente del BBB, Andoni Ortuzar, censuró ayer que el anteproyecto aprobado supone "un pucherazo" socialista para que "lo que no consiguen vía impositores o vía la representación institucional" se logre en el Parlamento, que además "no responde al mapa sociopolítico vasco. No obstante, Ortuzar indicó que "claro que hay margen" para negociar, si bien insistió en que debe ser "teniendo como prioridad la situación y el bien de las cajas", y "no quién del PSE entra en los consejos de las cajas o del banco". El consejero Aguirre respondió con sorpresa a las declaraciones de Ortuzar, calificándolas como "una barbaridad estratosférica".