MADRID. Así, el límite de gasto para las cuentas de 2012 ascenderá a 117.353 millones de euros, 4.669 millones menos que en las cuentas de este año.

La previsión de ingresos no financieros del Estado para 2012 es de 127.852 millones, una vez descontado el importe de la cesión de impuestos a comunidades autónomas y entidades locales.

Además, el Ejecutivo calcula unos gastos de 47.157 millones, de los que 8.875 millones corresponden al ajuste de la contabilidad nacional y los 38.282 millones restantes a la financiación de las administraciones territoriales.

El Gobierno prevé un déficit del Estado central para el próximo ejercicio de 36.657 millones, el 3,2 % del Producto Interior Bruto (PIB).

En cualquier caso, la vicepresidenta segunda, Elena Salgado, se mostró confiada en que los ingresos crezcan entre 3.000 y 4.000 millones de euros adicionales con respecto a lo presupuestado como consecuencia de la mejora económica, que podría permitir a las empresas ir liquidando sus pagos aplazados de IVA.

Otras razones para esperar una mejora de los ingresos son la lucha contra el fraude y la mejor gestión de la recaudación del Impuesto de Sociedades, sobre todo, según Salgado, en lo que se refiere a las empresas de mayor tamaño o grupos empresariales.

La ministra de Economía descartó una nueva subida de impuestos, así como una reducción de los salarios públicos.

En cuanto al gasto de los ministerios, incidió en que el recorte en este ámbito será superior al 3,8 %.

Por otra parte, como consecuencia de la liquidación de ingresos 2008 y 2009, las comunidades autónomas recibirán el año próximo 7.900 millones de euros.

Salgado expresó su confianza en que se dediquen a servicios básicos fundamentales como educación y sanidad, aunque recordó que se trata de la responsabilidad de los gobiernos regionales.

Por su parte, las entidades locales recibirán 2.300 millones, que según la ministra de Economía podrían ser utilizados para reducir la "alta morosidad" que perjudica -recordó- sobre todo a las pymes.

El vicepresidente primero del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, se mostró convencido por su parte de que este techo de gasto encontrará el apoyo parlamentario necesario cuando se remita al Congreso de los Diputados.

Con la aprobación del techo de gasto para 2012 se da cumplimiento a la ley de estabilidad presupuestaria, por la que el Gobierno debe remitir a las Cortes en el primer semestre del año esta cifra con la que se elaboran las cuentas.

Por parte de la oposición, el coordinador de Economía del PP, Cristóbal Montoro, dijo que el Gobierno ha planteado un objetivo de gasto que "no es creíble", ya que parte de un crecimiento económico que "no será factible conseguir el próximo año".

El Consejo de Ministros también aprobó el objetivo de déficit público del 4,4 % del PIB para 2012, que descenderá al 3 % en 2013 y al 2,1 % en 2014, dentro de los márgenes permitidos por el Pacto de Estabilidad y Crecimiento de la UE.

La previsión de déficit en el conjunto del sector público en 2011 es del 6 % del PIB, frente al 9,2 % de 2010.

El Estado deberá reducir en 2012 su saldo negativo desde el 4,8 % esperado para este año hasta el 3,2 %, mientras que para 2013 el déficit deberá ser del 2,1 % y del 1,5 % en 2014.

En cuanto a las comunidades autónomas, calcula un desfase negativo del 1,3 % este año, después de descontar el efecto de la liquidación negativa del sistema de financiación autonómica de 2009, que situaría esa tasa en el 3,3 %.

Ese déficit se mantendrá en 2012 y se reducirá hasta el 0,2 % en 2013 para alcanzar el equilibro presupuestario en 2014.

Asimismo, el Gobierno prevé que la Seguridad Social tenga un superávit este año del 0,4 %, que se mantendrá en el trienio 2012-2014.