Vitoria. Miguel Ángel Lujua ascendió ayer el último peldaño que le restaba para ser el próximo presidente de Confebask. La junta directiva de los empresarios vizcaínos, a los que les corresponde el turno de designación, arropó al candidato oficial de forma mayoritaria con 29 de los 32 votos. No hubo de hecho ninguna papeleta en contra, a pesar de que la patronal del sector metalúrgico intentó al principio del proceso presentar un aspirante alternativo, José Javier Arteche, que no logró a la postre ningún apoyo en el comité ejecutivo.
Los tres miembros de la Federación Vizcaína de Empresas del Metal (FVEM) de la junta se abstuvieron finalmente, en un gesto interpretado como un intento de restar presión al que será a partir de julio su máximo representante institucional. El comunicado de la Confederación Empresarial de Bizkaia (Cebek) destacó en ese sentido que toda la junta directiva "acordó prestar su apoyo y colaboración incondicional" a Miguel Ángel Lujua durante su mandato "los próximos cuatro años".
Sin embargo, la FVEM, que no hizo valoraciones ayer del resultado final de la votación, ha convocado hoy una rueda de prensa. Todo apunta a que el metal profundizará más en el enfrentamiento que mantiene su presidente, Ignacio Sáenz de Gorbea, con el líder de Cebek, José María Vázquez Eguskiza. Durante la junta, Sáenz de Gorbea leyó un escrito crítico con el proceso sin mencionar a Arteche
La decisión de no votar en contra de Lujua y el apoyo brindado junto al resto de federaciones, deja al próximo presidente de Confebask al margen de la pugna. Desmonta asimismo la teoría de una supuesta división en torno a la elección del candidato de Cebek, ya que una vez designado por unanimidad la semana pasada, Lujua era el único aspirante a dirigir la patronal vasca y lo que se hizo ayer fue únicamente refrendar esa posición.
Perfil de Lujua Superado ese trámite, la patronal vizcaína, aseguró que en la elección de Lujua, actual director general de Mutualia, se ha valorado su trayectoria profesional, su "extraordinario" conocimiento de la realidad económica y empresarial de Euskadi, sus "excelentes relaciones" con las administraciones forales, vasca y estatal, y su conocimiento y relación con las organizaciones empresariales del Estado y la propia CEOE.
La elección de Lujua supone un relativo cambio en el perfil del líder de Confebask. No es propietario de empresa, es un gestor con una larga trayectoria al frente de varias compañías. Un modelo de empresario muy similar al de las personas que dirigen empresas como Iberdrola o Telefónica, no son los máximos accionistas pero llevan el timón con pulso firme y proporcionan dividendo a sus inversores.
La leve oposición que ha tenido Lujua obedece en cualquier caso más a las tensiones entre Sáenz de Gorbea y Eguskiza, que decidió retirar su candidatura para que triunfará una candidatura con concitará un mayor consenso.