madrid. El vicepresidente primero del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, aseguró ayer que el Gobierno está a "quince minutos" de hacer la ley que regulará la negociación colectiva, después de que CCOO y UGT no hayan podido llegar a un acuerdo en la materia con la patronal al romper la CEOE la negociación. Rubalcaba utilizó esta frase recordando las del secretario general de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, que reconoció que el lunes estuvieron "a un cuarto de hora" de firmar un acuerdo. Sin embargo el vicepresidente del Gobierno fue claro: ese preacuerdo será la base que utilizará el Ejecutivo para aprobar el próximo viernes (10 de junio) su ley de negociación colectiva. La filosofía de la norma ser "potenciar la flexibilidad interna de las empresas sin que los trabajadores pierdan derechos".
Rubalcaba lamentó que no haya habido un pacto sobre la reforma, ya que es "necesaria", y más recordando que "desde el Gobierno se les dio todo el tiempo posible a las partes para que negociaran porque la apuesta era que la reforma se hiciera con acuerdo". Preguntado si el Gobierno va a tener "tiento" como le han pedido los sindicatos a la hora de legislar, el vicepresidente respondió que "el mismo que para llegar a quince minutos del acuerdo".
informe El Consejo de Ministros evaluó ayer el informe del Ministerio de Trabajo que será la base del decreto del día 10 y entre los elementos "más novedosos" Rubalcaba destacó el de acercar y dar un mayor papel a la negociación colectiva en el ámbito de la empresa, potenciando las medidas de flexibilidad interna, así como una mayor capacidad de adaptación de las condiciones de trabajo a cada circunstancias específica. Además, se trata de una reforma "profunda y ambiciosa", que pretende superar las "disfuncionalidades" reconocidas por los propios agentes sociales, tales como "la atomización, la falta de orden y de dinamismo, o la falta de flexibilidad y agilidad". Igualmente se contempla que el convenio sectorial ordene toda la estructura de la negociación, a la par que se amplían las materias que puedan ser negociadas en el ámbito de las empresas.
En materia de vigencia de convenios (ultraactividad) se apuesta por que cuando éstos expiren se resuelvan posibles bloqueos mediante la mediación o el arbitraje.