vitoria. La CAV transita por el escenario de salida de la crisis con el ánimo fatigoso de un paquidermo. Tras más de dos años de crisis profunda, el crédito de la economía vasca parece haberse agotado y los últimos coletazos de la recesión están siendo muy duros en Euskadi en los aspectos que afectan más directamente al ciudadano, el paro y el cierre de empresas. Con el desempleo en máximos históricos, el número de quiebras también se ha disparado en el arranque de este año y se ha batido el récord en un solo trimestre, con 126 concursos en apenas tres meses, según datos del Instituto Nacional de Estadísticas hechos públicos ayer. Lo más preocupante es que aunque el Estado también superó su récord trimestral con 1.803 procesos concursales, el incremento interanual español superó el 5% frente al 50% de la CAV. El ritmo de quiebras es diez veces mayor en el País Vasco que en el resto de comunidades. Desde el tercer trimestre de 2007 se ha registrado en Euskadi 1.056 quiebras, 72 eran de familias.
Álava, 13 procesos en marcha Por territorios, Bizkaia registró el mayor número de quiebras (75) y Gipuzkoa ocupó el segundo lugar con 34. En Álava se activaron 13 procesos. Más de la mitad de las empresas que se declararon en suspensión de pagos están englobadas en los sectores de la industria (35) y la construcción (30). Queda un tercer gran grupo de trece compañías adscritas al comercio y el resto (38) operan en otras facetas del sector servicios. Además, un total de ocho familias vascas activaron un proceso concursal ante la imposibilidad de hacer frente a sus compromisos de pago. Ahora será un juez el que decida como afrontan sus deudas. El concurso de acreedores tiene como principal objetivo reordenar las finanzas de la compañía que se declara insolvente para satisfacer los vencimientos a los acreedores y, al mismo tiempo, intentar evitar el cierre. Sin embargo, cuando la empresa no es viable los administradores judiciales pueden ordenar la liquidación. Esa amenaza se cierne ahora sobre los trabajadores de las empresas vascas que se han declarado en concurso de acreedores durante el primer trimestre del año.
empleo en riesgo Ocho de ellas tienen más de cincuenta empleados y 19 dan trabajo a entre 20 y 49 personas. La mayoría de ellas son pymes, pero hay 31 empresas que facturan más de diez millones de euros al año. Más de la mitad supera los dos millones de facturación.