Milán/París. El conglomerado francés de firmas de lujo Louis Vuitton Möet Hennessy (LVMH), que ha optado por la vía de las adquisiciones para crecer durante los últimos años, ha alcanzado un acuerdo con la familia Bulgari para adquirir la compañía italiana joyera del mismo nombre fundada en 1884 en una operación valorada en unos 3.700 millones de euros, en lo que representa la mayor compra de la multinacional gala en una década.

En concreto, el grupo LVMH emitirá 16,5 millones de acciones que entregará a la familia Bulgari a cambio de los 152,5 millones de acciones que poseen en la firma italiana de joyería de alta gama, representativas del 50,4% del capital social de Bulgari.

Además, lanzará una oferta de adquisición sobre el resto de títulos en poder de minoritarios a un precio de 12,25 euros por acción, lo que representa una prima de prácticamente un 61% sobre el precio de cierre de 7,59 euros del pasado viernes.

El presidente del grupo, Bernard Arnault refuerza así el área en la que es más fuerte el grupo Richemont, el segundo del sector, que cuentan con Cartier, Van Cleef & Arpels o Piaget. Bulgari compartirá espacio en LVMH con firmas como Tag Heuer, Zenith o Chaumet.

Tras el cierre de la operación, la familia Bulgari se convertirá en el segundo mayor accionista de LVMH, con el derecho de nombrar a dos miembros del consejo del grupo, mientras que Paolo y Nicola Bulgari continarán ejerciendo respectivamente como presidente y vicepresidente de Bulgari.

El consejero delegado de Bulgari, Francisco Trapani, pasará al consejo de LVMH para hacerse cargo de la división de relojes y joyería.

Con esta nueva adquisición, el conglomerado de empresas se convierte en el de mayor presencia mundial dentro del lujo.

El consejero delegado de LVMH, Bernard Arnault, destacó que la alianza entre la compañía francesa y la familia Bulgari representa una "combinación perfecta desde todos los puntos de vista".

Por su parte, Paolo y Nicola Bulgari afirmaron que LVMH y Bernard Arnault ofrecen todos los elementos necesarios para asegurar el futuro a largo plazo de la compañía familiar de lujo.

Hasta la compra de Bulgari, empresa italiana fundada en 1884, el último movimiento de la francesa LVMH fue una entrada hostil en el capital de otra firma de lujo, Hermès, en concreto, de artículo de cuero, donde controla un 20% desde octubre.