a. legasa

bilbao. Dámaso Casado aprueba la entrada del Gobierno en La Naval, pero pide que no se hagan discriminaciones y que se favorezca a todas las empresas por igual. A pesar de la complicada situación que atraviesa la economía, el secretario general de UGT-Euskadi confía en el plan de políticas activas que pondrá en marcha el Gobierno del PSOE para que las empresas contraten a más trabajadores.

Con los datos recientes de enero encima de la mesa, que han supuesto un jarro de agua fría para Euskadi (7.000 parados más en un solo mes), Casado considera que los "preocupante" no sólo es el aumento de desempleados, sino el incremento de personas con contrato temporal y en precario, una "sangría" que prevé finalizará en un mes, "aunque llevamos así desde 2008". En declaraciones a Onda Vasca, el líder de UGT se felicitó por la merma de ERE en el sector industrial, pero no así en el de servicios, "donde más está creciendo el desempleo", aseguró. A la pregunta de si cree que segurirán yendo a menos, el líder de UGT advirtió de que "lo normal" es que siempre haya alguno, así como alguna empresa que cierre, "pero esto no sólo ocurre ahora durante la crisis".

En este punto rescató el ejemplo de La Naval, donde "los trabajadores han decidido tirar para adelante", y advirtió de las consecuencias de una posible entrada del Gobierno en el accionariado de la firma vizcaína: "Si Lakua entra en una empresa sí y en otra no, para algunas será muy positivo, pero para las que no reciban este apoyo y vayan mal les será muy negativo. No se puede hacer discriminación de unos trabajadores en favor de otros", concluyó.