bruselas. La Comisión Europea propondrá el próximo miércoles 2 de febrero crear un registro comunitario de datos de pasajeros aéreos que entren y salgan de la UE, similar al existente en Estados Unidos tras los atentados del 11-S, para identificar a sospechosos de terrorismo.

El Ejecutivo comunitario pretende armonizar en toda la UE el uso de este tipo de información y reforzar la protección de los datos personales y otros derechos fundamentales.

Bruselas ya presentó en 2007 un plan para crear un registro comunitario de datos que fue bloqueado por falta de acuerdo entre los ministros del Interior de los Veintisiete. La entrada en vigor del Tratado de Lisboa obligó a la comisaria de Interior, Cecilia Malmström, a actualizar esta iniciativa.

En España ya se guardan los datos de los pasajeros aéreos extracomunitarios desde marzo de 2007.

En su propuesta original, el Ejecutivo europeo quería obligar a las compañías aéreas a entregar un total de 19 datos que se conservarán hasta un máximo de 13 años para realizar análisis de riesgos y poder identificar a sospechosos que puedan cometer atentados terroristas. El registro tendría un carácter descentralizado. Las aerolíneas suministrarían la información a la autoridad nacional competente que designe cada Estado miembro. Después, los países tendrían que compartir datos y los análisis de riesgo que se hagan a partir de ellos.

Solo estarían cubiertos los vuelos entre la UE y un país tercero y a la inversa, y no los intracomunitarios. Entre los datos que tendrían que entregar las compañías aéreas se encuentran el nombre, número de teléfono y dirección de correo electrónico, número de tarjeta de crédito o itinerario del pasajero. No se guardarían datos sensibles como la religión, la raza o las preferencias alimentarias.

En la actualidad, la UE tiene acuerdos para ceder los datos de los pasajeros a Estados Unidos, Canadá y Australia.