madrid. El vicepresidente primero del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, avanzó ayer que este primer acuerdo sobre la reforma de las pensiones, incluye también avances en las políticas activas de empleo (la regulación de la ayuda que sustituirá a los 426 euros), en la negociación colectiva y en la laboral, y forma parte de un "gran pacto" que prevé cerrarse pronto y que abarcará acuerdos energéticos, industriales y sobre investigación, desarrollo e innovación (I+D+i).

Rubalcaba dijo que la reforma dará "confianza" a la economía española dentro y fuera del país. Asimismo dio a entender que el Gobierno quiere aprovechar el acuerdo logrado en las últimas horas con los sindicatos y la patronal sobre las pensiones para impulsar las demás mesas negociadoras y desveló que ayer mismo se retomaron los contactos que, en principio, serán a dos bandas. Por una parte Gobierno, sindicatos y patronal; por otra los partidos políticos. Sobre estos contactos, cuyo peso específico llevará el exministro de Trabajo, Jesús Caldera, Rubalcaba concretó que los contactos con PNV, Coalición Canaria y CiU han sido intensos en los últimos días y se refrescarán la semana que viene, al igual que con las demás fuerzas políticas con representación parlamentaria.

justificación Por su parte, UGT y CCOO consideraron ayer "indispensable" la "corresponsabilidad del PP" como fuerza de gobierno con el acuerdo sobre pensiones, y "necesario" que las fuerzas de la izquierda "comprendan" que tenían que evitar que el Ejecutivo socialista "destrozara" el sistema de Seguridad Social.

Los responsables de Comunicación de UGT y de CCOO, José Javier Cubillo y Fernando Lezcano y los negociadores en materia de pensiones de ambos sindicatos, Carmen López y Carlos Bravo, justificaron ante los medios de comunicación la "responsabilidad" con la que han actuado al "atar" un pre-acuerdo la pasada madrugada. "No estamos incómodos con la posición de IU y otros partidos, porque tenemos un gran convencimiento de que cuando conozcan el contenido comprenderán que éste es uno de los grandes acuerdos firmados en democracia porque ha evitado destrozar el sistema", dijo Cubillo, que no obstante admitió que hará falta una "digestión".