Xabier Aja
BILBAO. La competencia entre Iberdrola y ACS en las áreas de energías renovables, basicamente mediante la promoción y explotación de parques eólicos, e ingeniería es una mera "concurrencia" y algo "anecdótico" para la constructora madrileña. La empresa presidida por Florentino Pérez no considera significativo que su filial de ingeniería compita con la de la empresa vasca para construir, llave en mano, centrales de ciclo combinado en América, en contratos de más de 300 millones y tampoco considera relevante que más del 60% de las inversiones de ACS en los últimos años hayan estado destinadas a a las áreas de energías renovables e ingeniería.
Éstas son algunos de los argumentos que presentaron los peritos de ACS en el juicio iniciado ayer en Bilbao, por al demanda de la constructora contra la eléctrica por las decisiones de la pasada Junta de Accionistas que negaron el acceso al consejo de Iberdrola a un representante de Florentino Pérez pese a contar, en aquel momento, con los derechos de voto de más del 12% del capital. La mayoría de los accionistas de Iberdrola rechazaron la propuesta de ACS por considerar que esta compañía ejerce una "competencia estructural y permanente" en áreas estratégicas como energías renovables e ingeniería.
En concreto, los peritos de PricewaterhouseCoopers aseguraron que el conflicto de interés se produce en el "daño" a los accionistas de Iberdrola por la "minusvaloración" de la capacidad de la eléctrica para generar valor a sus accionistas. A su juicio, las inversiones son un "parámetro relevante" para evidenciar ese conflicto y, en este sentido, subrayaron que sólo las áreas de energías renovables e ingeniería supusieron entre 2004 y 2009 el 62% de las inversiones de ACS y el 44% de Iberdrola. Además, añadieron que, en términos de valor, los analistas consideran que el negocio de ingeniería energética y energías renovables de ACS representaba el 34% de su valor y atribuyen al negocio de renovables de la compañía el 32% del valor de la empresa.
Los peritos de Forest, por contra, apuntaron que hay una "coincidencia" entre ambas empresas porque venden "lo mismo" y, por lo tanto, hay "concurrencia en el mercado", pero creen que no hay competencia "ni en términos de cantidad, ni de mercado". En concreto, han asegurado que la probabilidad de que un megawatio de ACS desplace a uno de Iberdrola es del 0,65%.