madrid. La confianza de los consumidores cayó en diciembre 5,4 puntos respecto a noviembre y se situó en el nivel más bajo desde mayo de 2009, como consecuencia del empeoramiento de las expectativas sobre la economía española y su situación actual.
El Indicador de Confianza del Consumidor (ICC) que elabora el Instituto de Crédito Oficial (ICO) se situó en diciembre en 64,6 puntos, frente a los 70 del mes anterior y a los 74,7 de diciembre de 2009.
El indicador continúa mostrando una fuerte volatilidad que probablemente está relacionada con las presiones que ha recibido la deuda española en los mercados internacionales, según el ICO.
Los componentes del indicador que más descienden son los referidos a la situación económica general, tanto actual como futura, mientras que la valoración y perspectivas de los consumidores sobre su economía familiar son algo menos negativas, aunque también bajan respecto al mes y al año anterior.
De esta forma, las cuestiones que menos retroceden son aquellas para las que los consumidores disponen de una mayor información.
Asimismo, los encuestados mostraron mayores expectativas de que suban los precios este año, debido al encarecimiento del petróleo y a los anuncios de subidas de precios regulados, como el de la electricidad.
Las perspectivas inflacionistas, unidas al estado de ánimo general de los consumidores, han mermado también sus expectativas de ahorro y de compra de bienes de consumo duradero.
A ello se suma la caída de las expectativas sobre posibles subidas de los tipos de interés.
Según el ICO, la evolución del indicador de confianza en diciembre parece mostrar que los consumidores retrasan la consolidación de la recuperación económica general y que en la última parte del año el consumo privado mantendrá una cierta atonía.