Madrid. El dirigente de la patronal catalana, Joan Rosell, fue elegido ayer, por amplia mayoría, nuevo presidente de la CEOE, cargo al que también aspiraba el líder de los empresarios andaluces Santiago Herrero.
En la asamblea general electoral celebrada ayer, Rosell se convirtió en el cuarto presidente de la CEOE, tras Carlos Ferrer Salat, José María Cuevas y Gerardo Díaz Ferrán, al que sustituye en el cargo.
Rosell obtuvo 444 votos a favor, mientras que Herrero recibió 247 votos. Además se registraron 16 papeletas en blanco y 3 nulas. Tanto Arturo Fernández, presidente de la patronal madrileña, por su apoyo, como Jesús Terciado, presidente de CEPYME, porque así figura en los estatutos de la CEOE, estarán entre los nueve vicepresidentes -frente a los 21 actuales- que habrá en la nueva patronal española.
El resto de nombres se conocerá el próximo martes, cuando se celebre la primera Junta con Rosell como presidente, en la que también se sabrán los nombres de los 46 miembros del Comité Directivo.
En su discurso de proclamación como presidente, Rosell aseguró que hay que convencer a los gobiernos y a los partidos políticos de que las reformas son la "mejor medicina" para el futuro del país.
Hay que "ayudarles y aplaudirles" para que hagan las reformas que "tengan que hacer", aunque puedan "perder votos en el corto plazo", aseveró. Además, consideró que las reformas son "imprescindibles" e "ineludibles" debido a la situación de economía y empresas, que calificó de grave.
"Debemos salvar nuestro estado del bienestar haciendo todas las reformas que deban hacerse y postergando el bienestar del Estado", dijo Rosell, y aclaró que no hay que tener "miedo" a hacer "reconversiones" en las administraciones, como se han hecho en varios sectores empresariales "muy importantes".
Cuanto antes se hagan será "más fácil digerirlas", porque no se puede continuar como si "nada hubiera pasado", advirtió Rosell, quien consideró que el Estado se ha hecho "muy voluminoso" y hay que ver "qué grasas se podrían reducir" en la administración. Rosell se puso a disposición de la Corona, del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, de los partidos políticos y de los sindicatos.
"Todos somos necesarios" Respecto a la candidatura de su contrincante, Santiago Herrero y de su socio, Jesús Banegas, Rosell indicó que "todos somos pocos y todos somos necesarios" y que, si quieren, formarán parte del nuevo órgano de gobierno de la CEOE.
En cuanto a Díaz Ferrán se mostró partidario de que, como marca la tradición, presida la Fundación CEOE, a no ser que "mucha gente" diga lo contrario en los órganos directivos.
Este ofrecimiento se produjo después de que Rosell, antes de conocer el resultado de la votación, dijera de Díaz Ferrán que durante su mandato hubo "luces y sombras" como le puede a pasar a cualquiera.
Más duro fue Herrero, quien, también antes de las votaciones, pidió superar la situación "temporal" de "crisis institucional" que se ha vivido, en referencia a Díaz Ferrán.
Díaz Ferrán se despidió de la CEOE con reproches al Gobierno, al que dijo que si hubiese adoptado antes las propuestas de los empresarios habría evitado el actual grado de "deterioro" de la economía y la recuperación estaría más próxima.