GASTEIZ. Sólo un 14,8 por ciento de las empresas del sector primario del País Vasco disponía en 2009 de un ordenador personal, lo que refleja la escasa utilización de las nuevas tecnologías por parte de estas compañías respecto a las de otros sectores.

El Instituto Vasco de Estadística (Eustat) ha dado hoy a conocer los resultados de una encuesta en la que se analiza la evolución del uso de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) en el sector primario durante el periodo 2007-2009.

El estudio refleja que en esos dos años ha aumentado el uso de este tipo de equipamientos en el sector primario, pero siguen teniendo unos porcentajes de utilización reducidos debido al pequeño tamaño de la mayoría de sus establecimientos, que tienen dos o menos empleados en el 87 por ciento de los casos.

El teléfono móvil es la herramienta más implantada (51,5%), mientras que sólo un 14,8 por ciento tiene ordenador personal, lo que implica que únicamente el 13,6 por ciento usa Internet, que sólo el 11,8 por ciento utilice el correo electrónico y que las empresas del sector primario con página web representen el 2,4 por ciento del total.

Sin embargo, en compañías de 10 o más empleados, el uso del teléfono móvil se amplía al 100 por cien, al 96,6 por ciento en disponibilidad de ordenador y al 82,6 por ciento en acceso a Internet, lo que las sitúa muy cerca de los porcentajes de otros sectores, salvo en contar con una página web, que se limita al 20 por ciento.

También se aprecian importantes diferencias entre las empresas agrícolas y pesqueras, ya que en estas últimas la implantación del las TIC es mucho mayor, pero su repercusión en la estadística general es mínima ya que las industrias dedicadas a la pesca suponen sólo el 1,7 por ciento del sector primario.

En las empresas pesqueras el uso del teléfono móvil se eleva al 100 por cien, el 72,2 por ciento tiene ordenadores, el 54,3 por ciento están conectadas a Internet y el 54,4 por ciento acceden al correo electrónico.

Según el Eustat, estas diferencias no se deben sólo a su diferente actividad, sino que incide también el tamaño de las explotaciones, mucho mayores en las de pesca.